Hassle [Problemas #3]✔️

Capítulo 2

"No era real"

Audrey

Ver una camioneta negra cada que checaba el retrovisor me recordaba demasiado a mi infancia. Mi madre acostumbraba a desplegar guardaespaldas a su alrededor todo el tiempo y la mayor parte de mi vida la pasé rodeada de ellos. Ahora todo se sentía como un extraño Deja Vu, porque seguían siendo los hombres de mi madre los que me escoltaban a todas partes, solo que esa vez seguían las órdenes de Andrew por llevar la llave de Imperio. Miré a mi hermano en el asiento contiguo a mí, maniobrando el volante para doblar en la calle de Nova. No había conseguido que me dejara ir sola, ni siquiera lo intenté mucho, sabía reconocer una batalla perdida. Andrew se tomaba muy en serio mi seguridad, no solo por la muerte del padre de Suelym, sino porque ese evento le recordó que el asesino de las notas estuvo involucrado en la muerte de nuestro padre. Cada que me miraba podía ver el miedo oculto en las sombras oscuras de sus ojos y, aunque intentaba lucir serena para no alterarlo, yo también temía por él.

—Me quedaré afuera, no te preocupes —dijo, con la vista hacia el frente mientras estacionaba frente a la casa de Nova—, no pienso avergonzarte frente a tu novia —bromeó en un evidente intento por aligerar el ambiente.

—No es mi novia —rectifiqué, quitándome el cinturón de seguridad—. Volveré en unos minutos.

Andrew asintió, sacando su teléfono y abriendo sus mensajes para matar el tiempo mientras me esperaba. Yo tuve que hallar valor para bajar del auto, no porque temiera que algo me pasara, sino por la incertidumbre que Nova me provocaba últimamente. Estábamos bien, es decir, nos habíamos hecho grandes amigas, me gustaba y estaba segura de que yo también le gustaba a ella, a pesar de nunca haber tenido un avance romántico real; pero algunos días después del funeral del padre de Suelym comenzó a volverse distante y a cortar comunicación. No respondía mis mensajes, no quería salir a ningún sitio, no quería visitarme o que yo fuera a verla a ella, simplemente cortó el lazo y me echó a un lado. Le di espacio, no era ajena a su pasado, sabía que todo esto debió de recordarle a Lina, pero dos meses es mucho tiempo y yo necesitaba saber qué estaba ocurriendo. Estaba harta de que cada persona que me interesaba me sacara de su vida con tanta facilidad.

La fachada rosa pálida de la casa me recibió en un silencio sepulcral mientras tocaba a la puerta. Esperé algunos minutos sin recibir respuesta y, a riesgo de mostrarme demasiado impaciente, volví a tocar. Un apagado grito brotó del interior de la vivienda, algunos segundos después la puerta fue abierta, pero el ceño fruncido en el rostro de Nova me hizo sentir que no era bienvenida.

—Hola —dijo, mirando por sobre mi hombro, seguramente notando a Andrew en el auto—, no te esperaba.

—Lo siento por venir sin avisar, es que estaba preocupada, no respondes mis llamadas.

Nova asintió, abriendo la puerta en su totalidad para que tuviera espacio para pasar al interior de la casa. En otra ocasión me hubiera fijado en la decoración, intentando descubrir si ella había tenido participación en la misma a través del estilo y colores, pero no hubo detalles que analizar. Los suelos de madera pulida y las paredes de color claro estaban impolutamente desnudos. Todo estaba vacío, a excepción de algunas cajas dispersas por la sala, algunos con su nombre escrito, otros con los de sus padres, acompañados de rotulados negros como "frágil", "cuadros" o "ropa". Se estaba yendo.

—Pensaba decírtelo de otra forma —murmuró.

Me giré hacia ella, viéndola esconder sus manos en el bolsillo de sus jeans mientras mantenía la mirada baja. ¿Ni siquiera podía mirarme? No. Ella no pensaba decirme absolutamente nada. ¿Ese era su plan? ¿Largarse y dejarme esperándola como una estúpida sin saber que no volvería a llamarme?