Llamamos al timbre y al abrir nos sorprendimos.
- Hola chicas cuanto tiempo desde la última vez que nos vimos.
- Hola Lamine, si mucho tiempo.
- ¿Qué pasa chicas?
- veníamos a pediros que bajarais la música que son las tres de la mañana y queremos dormirnos porfa.
- Oh si es que estamos haciendo una pequeña fiestecilla y se nos ha ido un poco de las manos, están esos que parecen terremotos.
- No pasa nada entiendo que hagáis fiestas somos jóvenes.
- Bueno chicas os dejo que tengo que cuidar a los chicos, aunque sea el menor de todos ellos y no os preocupéis que ahora bajó el volumen. Descansad.
- Buenas noches seguir pasándolo bien.
Volvimos a casa y al poco rato nos dormimos estábamos cansadas de todo el día.
A la mañana siguiente me desperté bastante tarde sobre las dos y algo, pero es que había pasado una noche bastante malas no había parado de tener pesadillas. Cuando bajé estaba Lucía haciendo la comida,
- Buenos días Lu
- Buenos días cariño, ¿Cómo has dormido?
- Bastante mal la verdad, no he parado de tener pesadillas.
- Pues imagínate si hubiéramos dormido con la música.
- No me lo quiero ni imaginar.
- Le quedan diez minutos a la comida, sube a cámbiate si quieres.
- Vale, ahora bajo.
Subí me pegué una ducha rápida, me puse algo cómodo no tenía intención de salir de casa. Escuché un grito de Lucía desde mi habitación, bajé comimos y nos pusimos a tomar el sol.
*Lamine
Me despertado sobre las una y media y al bajar no había nadie despierto como suponía recogí un poco todo a que anoche quedo bastante desordenado. Espere a que bajaran los chicos, fueron bajando y cuando bajo el ultimo Gavi como siempre, sin duda el que más duerme, les empecé hablar.
- Chavales, escucharme.
- que pasa bro. – dijo Héctor.
- anoche tocaron el timbre porque estábamos molestando con la música y querían dormir.
- y que hay de especial, normal que tocaron con la que armamos. – contesto Pedri.
- pues que no fue un vecino cualquiera.
- y quien era entonces porque no se ha mudado nadie que nosotros sepamos. – volvió hablar Pedri. – lamine nos vas a decir quien vino a tocar al timbre o lo tenemos que adivinar.
- eran Lucía y Leila las chicas que conocimos en Sevilla y que por la noche fuimos a la discoteca con ellas.
- pero, ¿qué hacen ellas aquí? – dijo Gavi.
- no sé, lo único que sé es que son nuestras vecinas.
- ¿nuestras vecinas? Imposible. - siguió hablando Gavi un tanto sorprendido.
- si nuestras vecinas, y he pensado en invitarlas a pasar la tarde y a cenar para que vosotros también las volváis a ver.
- me parece buena idea. – hablo Ferrán y todos los demás afirmaron.
- pues escribo a Leila y la digo que luego vengan. Asique vamos a terminar de limpiar la casa que la dejasteis ayer llena de mierda.
* Leila
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TODO LO QUE HAGO ES POR TI
FanfictionLeila se muda a la ciudad donde quiere vivir desde pequeña, Barcelona, con su mejor amiga Lucía, pero algo la hace cambiar el rumbo de su vida cambiándosela por completo en poco tiempo.