Bajo el grato cielo, que boda viste y noche en el fondo
siempre ha sido (desde que existe), guirnalda y velo
al tacto dieron, como dos espejos, con un recelo beodo,tan cerca y tan lejos estuvieron lo etéreo y lo inmortal,
el agua en movimiento y una caricia en el umbral,
el retrato quieto, dos reflejos, la malicia en un suspiro,
alterca un viento el temple inmoral de cuatro zafiros;¿qué, de este teatro, distingues acabado, observador?
Abrazaron su estado natural, gélido, infinito y oscuro,
eran el bosquejo fatuo del pasado, presente y futuro,
y eran el lienzo donde se ha dibujado estro aterrador,en la profundidad hay caos, interminable, indefinido,
no los obnubila el vaho ni su vastedad adversa,
de la sensualidad tranquila que hostil conversa,
en vano albergaban un temor sutil al inevitable olvido;en sus miradas la cruel verdad: son otros y uno mismo.
A flor de piel, como un viso, un rubor de afrodisíaca luz
tapaba en Dorian y Narciso, de nosotros, negro abismo.
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Retales de un hombre polilla
Random«Estos son restos de un cuaderno incendiado, cuyas palabras interrumpidas volvieron a mí de vez en cuando, buscando una salida que no fuera un disparo, ni el resplandor de un faro tomado por amparo suicida.» _________ Versión actualizada de mi prime...