"Ganadores" la palabra que resuena tan confusamente en mi mente, como me podía considerar victoriosa, siendo que para llegar a esta posición tuve que asesinar a personas inocentes.Todos los lujos de los que ahora disfrutaba, dinero, más del que necesitaba,una nueva casa, y el que menos merecía, Peeta. No podía ni imaginar el dolor que ahora estarán sintiendo las familias de los tributos derrotados, perder a un hermano, un hijo, un sobrino, perder a alguien que amas y te importa, suena lejano, pero la posibilidad está más cerca de lo que imaginamos...
Los días pasan, y la gira de la victoria se acerca, de todas las festividades que ganar los juegos del hambre conlleva, como la repartición de comida en todo el distrito, que por cierto, es mi favorita, hasta la gira, que es la que más me aterra.
No se como haré para pararme en esa tarima, y observar directamente a los ojos a las familias de las personas inocentes que perdieron su vida al costo de que nosotros ganáramos, no se como afrontar la popularidad y fama que ahora tendremos, yo no quería esto, no quería ir a esos juegos, tampoco quería ver a mis seres queridos sufrir, yo no pedí esto, nadie pidió esto.
Pero cuando en mi mente comienza la tormenta, siempre está Peeta para apoyarme, y yo a él, está claro que nuestros recuerdos sobre los juegos nos aterran cada noche, es común que me despierte a la mitad de la noche, ya sea por Glimmer, Clove o Rue, y la culpabilidad de no poder hacer nada por salvarlos.
El sol comienza a asomarse, veo el rostro de Peeta, tan relajado como siempre, ni si quiera me doy cuenta de cuando tiene pesadillas, ya que no emite ningún ruido. Siento su brazo recorrerme, desde la cadera hasta el rostro, pierdo la noción del tiempo hasta que escucho su voz.
La gira de la victoria comienza mañana, así que me tomo mis últimas horas libres para hacer lo que más me gusta, estar con los que amo, Peeta prepara el desayuno; pan recién horneada con mermelada de fresa, cortesía del Capitolio.
Las horas pasan y nuestros invitados comienzan a llegar; Mis padres, los padres de Peeta, Katniss y Delly, amiga de Peeta y mía. Haymitch llega algo tarde, pero para nuestra sorpresa, no tan borracho como siempre.
Katniss, ha peleado con Gale, por lo agresivo que él puede llegar a ser, así que, por respeto a mi mejor amiga, no lo hemos invitado.Disfrutamos de una hermosa comida, más bien, ellos disfrutaron, yo me limité a tomar un poco de té con algo de pan, ya que estos días me he sentido un poco mal, Peeta insiste con que vaya a la guardia, pero me niego, estoy segura que mejoraré.
Las historias de pequeños comienzan a llegar, nuestros padres cuentan la cantidad de estupideces que Peeta y yo hacíamos en preescolar, cuando la tarde llega, todos los invitados se retiran, ha excepción de mis padres. Peeta, como el caballero que es, acompaña a sus padres a su casa. Me doy cuenta que él te se ha terminado, y, como adoro esa bebida, aprovecho para ir al quemador a comprar un poco.
Té de todas variedades, Clásico, fresas, manzanilla y bayas. Al llegar a mi hogar veo a mis padres, algo preocupados, estoy a punto de preguntar qué pasa, pero mi padre interrumpe;
— ¿Donde estabas? - dice él
_____: Solo en el que... - mi madre se percata de lo que dire y antes de que pueda decir la frase completa exclama;
— Hija, tenemos visita, detrás de ella salen dos agentes de la Paz, en ese instante se, que estoy en problemas.
Antes de que pueda decir algo más uno de los agentes de la Paz, comienza a mandarme;
— Señorita Williams, venga por aquí por favor, es de urgencia — es irónico, alguien dándome órdenes en mi casa.
El Presidente Snow estaba sentado en mi habitación, su presencia llenando el espacio con una mezcla de amenaza y autoridad. La rosa blanca contrastaba con la oscuridad de su traje, y su mirada, tan fría como el hielo, no se apartaba de mí.
— ____ me sorprende lo acogedor que es tu hogar —dijo, su voz impregnada de una amabilidad forzada.
—¿Qué quiere presidente, pregunté, tratando de mantener la firmeza en mi voz mientras cruzaba los brazos.
—He venido a hablar sobre tu relación con Peeta —dijo, girándose para mirarme directamente—. Al Capitolio le encanta su historia de amor. Es conmovedora, realmente.
— Y ¿qué pasa con Peeta,? Snow. sabiendo que no había venido hasta aquí solo para darme cumplidos.
Una sonrisa delgada apareció en sus labios, pero sus ojos seguían igual de fríos.
—Algunos, sin embargo, hay quienes dudan de que sea real. Creen que todo es una farsa.
Mi corazón latía con fuerza, pero no aparté la mirada.
—Están equivocados —dije con firmeza—. Amo a Peeta.
Realmente lo amo, ya lo he dicho , pero, el es realmente el chico con el que siempre soñé, al cual mis padres quieren, el cual siempre está ahí.
Snow dio un pequeño paso hacia mí, su presencia más intimidante que nunca.
—Eso espero, _____. Por tu bien y el de todos los que te importan. —Su voz bajó a un susurro—. El Capitolio está observando. Fingir amor es una apuesta muy peligrosa.
Y, no te centres en convencer a los distritos, convénzame a mi...La amenaza era clara, y el aire se sentía más pesado con cada palabra que decía. Snow se enderezó y se dirigió hacia la puerta, pero se detuvo antes de salir.
—Disfruta de tu tarde, _____. Recuerda lo que te he dicho.
Y con eso, se fue, dejando la amenaza flotando en el aire mientras la puerta se cerraba tras él. La sensación de su presencia permaneció. Finalmente me atrevo a salir de la habitación, mis padres ya no están, pero veo una figura conocida junto al marco de la puerta.
_____: Peeta... ¡llegaste!
Corro hacia él y lo beso, él tarda unos segundos en responder ya que lo tomo por sorpresa, nuestros labios se encontraban en un beso suave y lento. Sentí su mano subir hasta mi rostro, sus dedos acariciando mi mejilla dulcemente. Nos separamos lentamente, nuestros frentes apoyándose una contra la otra
Nos quedamos allí, en la puerta de mi casa, disfrutando del instante de paz.Peeta: amor, solo me fui como por una hora - río
_____: Sí, ¿pero no puedo extrañar a mi novio? - volví a besarlo, pero esta vez, solo un pequeño pico en los labios.
_____: además, amor, tengo que hablar contigo, de algo muy importante.
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i think he knows - Peeta Mellark y tu. THG
FanfictionPeeta mellark y ____ Williams se han admirado en secreto durante años. El un increíble panadero, y ella, una hermosa chica amante de la moda. Los dos adolescentes apenas habían cruzado palabra en los 16 años de vida de cada uno, pero si sabian algo...