XXIII. Stigma

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[⚠️ El capítulo contiene una escena de intento de suicidio, si eres sensible ante estos temas, por favor, leer con cuidado y recordar que esto es ficción

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[⚠️ El capítulo contiene una escena de intento de suicidio, si eres sensible ante estos temas, por favor, leer con cuidado y recordar que esto es ficción.]

Respiró profundo, sus piernas se tambaleaban sobre el borde del puente y estaba a penas afirmado por sus manos. Sus ojos se cerraban por la borrachera, no lograba enfocar pero estaba seguro de lo que hacía.

— ¡JAEMIN! — Y cuando el peso de su cuerpo le quería hacer caer, su cintura se vió rodeada por unos brazos, tirándolo al suelo para evitar cualquier peligro.
— ¿Por qué siempre tienes que frustrar mi muerte? — No estaba seguro de quién se trataba pero no le hablaba al chico que estaba frente a él sino que al destino.— Déjame darle de una maldita vez el fin que quiero a las cosas, déjame odiarte, déjame olvidarte, déjame tomar mis propias decisiones por una puta vez en la vida. Yo soy el culpable de todo y solo quiero dejar de sufrir.
— Nana, no es necesario que hagas esto. Por favor, somos muchos quienes te queremos y no me perdonaría que te vayas, al menos no de esta manera…

 Por favor, somos muchos quienes te queremos y no me perdonaría que te vayas, al menos no de esta manera…

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4 horas antes.

Jaemin tomó un taxi, antes de que la lluvia lo empapara, y le dió la dirección del club en el que estaba SeungMin. Miraba a través de la ventana como las gotas dibujaban surcos en el cristal y como los mismos reflejaban las luces de la calle mientras sorbía su nariz a ratos. El platinado estaba desolado, la tormenta en su interior era destructiva y se sentía como una rata que cae en la trampa de un sádico solo por diversión. Las palabras del conductor se escuchaban lejanas, todo a su alrededor parecía girar y causarle náuseas hasta que el hombre volvió a hablar un poco más fuerte, despabilandolo. Pagó por el viaje y salió del vehículo, escondiendo su rostro entre las solapas de su chaqueta para protegerse de la escasa lluvia que quedaba.

Dentro del club, el ambiente era muy diferente a lo que ocurría dentro de su alma. Era festivo, alegre, sonaba la música de moda y todos bailaban y bebían muy a gusto. De haber tenido otro estado de ánimo, de seguro sería un lugar en el que estaría encantado, disfrutando con los pocos amigos que tenía. SeungMin y los demás lo divisaron a lo lejos y trataron de llamar su atención, pero apenas conectaron sus miradas, Jaemin salió corriendo del lugar. Cuando ya no podía escuchar la música en la calle, se apoyó en una pared de un callejón oscuro y liberó la presión de su estómago vomitando, sentía su garganta arder por la bilis y terminó limpiando las comisuras de su boca con la manga de su chaqueta. Respiró por unos segundos, el móvil no dejaba de sonar pero no le prestó atención, se recompuso como pudo y caminó hasta una tienda de conveniencia cercana.

ᴄʀᴀꜱʜ ᴏɴ ʏᴏᴜ [ ɴᴏᴍɪɴ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora