MI QUERIDO MAFIOSO [+18]

Cap 22 GRANDES EMOCIONES

GRANDES EMOCIONES

Nuestro beso conduce cada una de las emociones del momento, reflejando la unión y conexión espiritual de nuestra relación. El aroma sutil y el dulce sabor de los labios de Nick me hacen sentir en el cielo.

Sus manos se deshacen de mi bikini y sus labios abandonan los míos para luego bajar a mi cuello, dejando bellas marcas de sus labios. Me sonríe antes de continuar bajando hasta el punto que el agua tapa su cuerpo por completo. Siento cómo sus labios recorren mi piel deteniéndose en mi ombligo. Una de mis manos suben a acariciar su hermoso cabello mientras me dejo llevar por la pasión del momento. Continúa repartiendo besos por todo mi cuerpo, dejando un cosquilleo en mi entrepierna.

Me sorprende su resistencia bajo el agua después de unos minutos, sube devorando de nuevo mis labios en un beso suave y tan apasionado que mi alma se envuelve en una profunda calma, fortaleciendo cada uno de mis sentimientos hacia Nick.

Baja lentamente sus manos posándolas en mis muslos levantando mi cuerpo, enrolla mis piernas en él estabilizándome, en pocos minutos lo siento entrando en mí con movimientos lentos y delicados, al instante mis manos se aferran a su espalda sintiendo como aumenta el vaivén de movimientos que me provocan olas de placer, arrancándome suspiros y gemidos.

A medida que la pasión crece, la intensidad del beso aumenta lentamente, con movimientos mas profundos y ardientes transmitiendo nuestro deseo apasionado.

En mi cuerpo se hace presente una sed insaciable con la sensación de querer llenarme solo de él, entre jadeos y sus fuertes envestidas clavo mis labios en el hueco de su cuello, apoderándome de él por completo. Me concentro tanto en un lugar específico que me es imposible separarme, Nick comienza a quejarse mientras disminuye sus movimientos y da fuertes apretones a mis glúteos.

- Nena!! - dice con vos ronca intentando alejarse, pero no lo dejo, apretándolo más a mi. Separo mis labios de su cuello, conectando sus ojos con los míos - Me mordiste conejita - una parte de sus labios sube mientras me lanza una mirada pervertida.

- Lo siento - niega con la cabeza para luego unir nuestros labios, continuando con su hermosa danza.

Minutos después, aumenta sus envestidas, haciéndolas más fuertes y rápidas. Un inmenso calor y cosquilleo se apoderan de mi zona, aumentando el deseo y la lujuria en mi cuerpo. La sensación es tan fuerte que dejo de respirar por un momento, mi vista se vuelve nublada, mis uñas se entierran en la espalda de Nick sin tener intenciones de soltarse. En unos pocos segundos, nuestros cuerpos llegan al éxtasis al mismo tiempo, como una explosión que recorre cada parte de mi, provocando que mi cuerpo se estremezca, saliendo de mi garganta constantes gemidos y gritos ahogados.

Es tan placentero que no quisiera dejar de sentirme así, pero llega al final, dejándome débil y sin energía, si no fuera por Nick que aún me sostiene, ya mi cuerpo se hubiera desvanecido.

Me cuesta un poco estabilizarme y que mi vista vuelva a la normalidad, pero después de unos segundos tengo de nuevo el control de mi cuerpo

- Cariño, ¿Estás bien? - nuestra respiración aún es agitada y nos cuesta hablar.

- Perfectamente - sonrío para mis adentros - Te... Te amo - las palabras salen de mi boca sin anticipación. Nick se separa, clavando su mirada en mis ojos con una enorme sonrisa adornada en el rostro.

- Alay... Te amo - conecta nuestras frentes, reposando en ella.

- Suena tan hermoso mi nombre cuando sale de tus labios - acaricio su labio inferior con mi dedo pulgar.

En las plantas de mis pies se apodera un frío inmenso al sentir de nuevo el suelo debajo de ellos. Nick me entrega mi bikini, ayudándome a vestirme.

- ¿Tienes habré? - pregunta Nick, mientras amarra mi traje.