Cap 29 SUPERANDO OBSTÁCULOS

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  SUPERANDO OBSTÁCULOS

Salimos de casa camino hacia la universidad, con el corazón latiendo un poco más rápido, me preparo mentalmente para la reunión. A medida que nos vamos acercando al lugar, repaso lo que quiero decirle. Quiero compartir mis experiencias, mis desafíos, y sobre todo, mi firme determinación de volver a las aulas.

Me imagino de regreso en el campus, rodeada de libros y compañeros, absorbiendo cada lección con entusiasmo.

Al llegar al edificio administrativo, siento una mezcla de nerviosismo y emoción.

- Pequeña, ¿quieres que te acompañe? - dice mi padre al notar mi nerviosismo.

- No te preocupes - respondo con una sonrisa - Entraré -

- ¿Podrías avisarme cuando salgas? - dice tratando de esconder su preocupación - Vendré por ti -

- Por supuesto - estampo un pequeño beso en su mejilla antes de salir del auto.

Cuando llego a la oficina del director, respiro hondo antes de tocar la puerta. Al entrar, me encuentro con su mirada amable y profesional. Después de intercambiar algunos saludos, le explico mi situación.

Cómo he estado fuera por un tiempo, pero que ahora estoy lista para retomar mis estudios y avanzar en mi educación.

- Me tomé un poco de tiempo, pero he reflexionado mucho sobre esta decisión - le digo bajando un poco mi mirada -. Quiero seguir aprendiendo y crecer, no solo académicamente sino también en el aspecto personal -

El director escucha atentamente mientras expongo mis ideas y planes para el futuro. Me siento apoyada por su interés genuino en mi historia. Al final de nuestra conversación, él asiente con una sonrisa.

- Me alegra saber que estás lista para volver a retomar tus clases en la universidad - dice subiendo un poco la comisura de sus labios - Vamos a buscar la mejor manera de ayudarte a reincorporarte a tus estudios -

- Se lo agradezco mucho - bajo un poco la cabeza en forma de respeto.

Al salir de su oficina, una ola de alivio y emoción me inunda, me siento un poco más ligera como si una carga se hubiera levantado de mis hombros. Decido dar un pequeño paseo por el campus disfrutando de la brisa fresca y recordando los momentos que viví aquí. Cada rincón me trae recuerdos, las risas con mis amigos, las largas noches de estudio y la mezcla de emoción con el temor antes de cada examen. Me siento emocionada e inspirada al pensar en la nueva etapa que está por venir.

Mientras camino por los pasillos, mi mente viaja al pasado como si hace una eternidad que estuve caminando en ellos. Observo a los estudiantes que pasan buscando a mis amigas entre ellos, todo parece perfecto hasta que de repente mis ojos se encuentran con un rostro bastante familiar pero desagradable... "Andrew". Por unos segundos, su rostro es de sorpresa, pero cambia de repente, se puede notar en nuestras miradas que no tenemos muy buena relación, su mirada está llena de desprecio y burla.

- Vaya, vaya. Mira quién se dignó a aparecer - dice con sacasmo acercándose a mí - Pensé que te habías perdido... para siempre - lo último lo dice en un susurro con satisfacción.

Su comentario me hiere y en un instante, mi alegría se desvanece. Pero por supuesto que no me dejaré intimidar por un idiota como él.

- Tenía que toparme con el más capullo del campus - respondo tratando de mantener la calma - Deja de escupir tanta mierda y mejor cierra la boca - le digo con firmeza.

Andrew se ríe como si no le afectara lo que acabo de decir.

- Claro, fingiste tu desaparición. Seguro solo querías evitar la vergüenza de no ser lo suficientemente buena para seguir aquí - responde con sus palabras cortantes como cuchillos.

MI QUERIDO MAFIOSO [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora