17. Overlords

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Unos agentes están viendo una pizarra en dónde tienen distintas fotos de demonios y criaturas extrañas contando el enorme pez del lago. Los dos agentes presentes analizaban a profundidad cada prueba de los avistamientos teniendo consigo un papeleo enorme de dibujos y teorías sobre la mesa.

— ¡Todo se está juntando! ¡Pero aún así necesitamos una prueba real para que el gobierno nos crea!

Habla el hombre mostrando la desesperación en su voz.

La puerta se abre alarmando a ambos agentes quienes sacan sus armas y señalan en la dirección del sonido. Ellos se alivian cuando frente a ellos se encontraba una persona de confianza.

La persona es un chico común y corriente. Su cabello es rubio y sus ojos son azules. Su cuerpo está sudando y muestra rayones y marcas de tierra en su cuerpo como prueba de que tuvo un accidente o estuvo involucrado en algún tipo de pelea.

Lo más curioso de todo esto es la sangre dorada que baja de su nariz.

— Yo soy la prueba.

La escena cambia para mostrar una calle en la ciudad Pentagrama. Alastor camina por la calle, seguido de cerca por los Egg Boiz de Pentious, pequeños huevos, quienes son sus nuevos secuaces.

— ¡Ay, muchacho! ¿Cuál es el plan, jefe? ¡Me gusta tu traje! ¿Para qué sirven las astas? ¿Puedo tocar tu bastón? ¿Son esas tus orejas o es tu cabello? ¡No puedo decirlo!

El ojo de Alastor tiembla mientras camina por la calle, con una sonrisa de dolor en su rostro. Una persona en la sombra lo observa desde atrás, antes de aparecer frente a él, revelándose como un Overlord, Zestial.

— Hola, Alastor. ¿Cómo te va este día?

Alastor hace un efecto de sonido estático de radio, luciendo un poco asustado.

— ¿Quién es ese, jefe? ¿Quieres que le dé una paliza por ti?

— ¡Sigue en silencio si valoras tu caparazón!— Alastor golpea el caparazón de Egg Boi con su bastón antes de volverse hacia Zestial—. ¡Saludos, Zestial!

Un demonio sale de un callejón y ve a Alastor y Zestial.

— ¡Oh, mierda!

— Ah, el clima se vuelve hermoso en este día.

Un demonio vaquero sale por la puerta trasera después de una pelea, y estaba a punto de volver a entrar cuando nota a Zestial y entra en pánico antes de huir.

— ¡De hecho, parece que tendremos lluvia ácida esta tarde!

Un demonio, al ver a Zestial, se vierte gasolina encima y se prende fuego, gritando.

— ¡Si nuestra suerte nos acompaña! Me deleito con los gritos. ¿Cómo estás?

Zestial comienza a caminar por la calle con Alastor mientras toneladas de demonios los ven y se esconden, corren o evitan que se interpongan en su camino.

— Ha pasado una edad desde que nos honraste con tu presencia. Algunos han contado historias descabelladas sobre tu caída en... brazos sagrados.

La sombra de Alastor sonríe antes de desaparecer.

— Oh, acabo de tomarme un merecido año sabático, nada serio— Alastor se ajusta la pajarita y el abrigo en el reflejo de una ventana—. ¡ Aunque es divertido mantener a todos alerta!— se ríe mientras suena un efecto de risa en su micrófono.

— También ha habido rumores de tu relación con la princesa y su reciente vuelo de fantasía. Dime…— la capa de Zestial se abre brevemente—. ¿cómo caes en tal locura?

Ángel Caído || Hazbin Hotel x Male ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora