"Nunca debemos prometer algo, ya que son ataduras aterradoras"Mario Benedetti.
Lykos
Alacrán
Calypso. Una mujer como ella, jamás había conocido en mi puta existencia. Es bella por dentro y por fuera. Una mujer trabajadora, una persona increíble. Quiere hacerle ver al mundo que es una mujer dura, fría y sin emoción, pero es solo una coraza para protegerse. No sé de qué, pero lo voy a descubrir.
Voy a hacerle conocer al mundo la mujer hermosa que es, y no hablo de la belleza física, no, porque de esto, todos lo saben ya. Todos están locos por ella. Voy a demostrar que a pesar de su carácter fuerte, es una mujer que daría la vida por sus seres queridos. Van entender que su belleza no es solamente física sino también interior. La van a respetar como es y por lo que es.
Me gusta que se sabe defender sola, que sea tan independiente y feroz que hermosa y peligrosa. En la sala de reunión solo bastó un comentario más de estos asquerosos, para que mi puño les hiciera nuevamente la cara a cada uno.
Ya tengo suficiente con las insinuaciones de mi padre como para aguantarme las de ellos también.
Desde mi padre la vio en el evento de los premios ha querido tener algo con ella. Se quedó como hechizado por ella. En el coche para la casa no dejaba de hablar de su belleza, de lo maravillosa que es, y de lo fascinado que lo tenía y blablabla.
No voy a permitir que él intenta algo con ella. Es mía y no la compartiré con nadie, mucho menos con mi padre.
De solo imaginarlo me da asco.
—Me tienes que decir dónde te metiste anoche —entra mi hermana molesta tirando mi móvil sobre mi escritorio—. Toma tu móvil.
Se me había olvidado que lo dejé en la mesa ayer antes de seguir a mi preciosa.
La sonrisa me sale sola.
—¿Y esta cara tan sonriente? —tomo mi teléfono viendo si tengo llamadas perdidas y hay varias del mismo número—. Me ha dicho papá que no llegaste a dormir anoche, ¿Es lo que me estoy imaginando?
—Preferí quedarme en el Casino.
Ignoro su pregunta. Tengo muchas llamadas de él. Necesito devolverlas.
—Supongo que la compañía que tenías valía la pena.
—Créeme que valía la pena, Camila —mi hermana mayor se sorprende por mis palabras—. Valió la puta pena haber esperado toda la vida para encontrarla.
—¿La conozco?
—Creo que sí, ¿Te acuerdas de la mujer cuya empresa ganó el premio en el EEA?
—¿Calypso Gangnera? —asiento— Pero Lykos no puedes estar con esa mujer.
Su voz me deja congelado. Es la misma que usa cuando está asustada. La he visto así de alterada muy pocas veces.
—Claro que voy a estar con ella. Es más, estamos intentando algo.
—¡Que no! Lykos —se levanta— Papá no va a aprobar esta relación y lo sabés muy bien.
—¿Y quién te ha dicho que necesito de su aprobación? —frunzo las cejas.
—Pero es tu padre Lykos, su aprobación y bendición siempre serán necesario.
Y eso es lo que me molesta de mi hermana mayor. Que sea tan conservadora.

ESTÁS LEYENDO
LA RULETA NEGRA [+21]
RomanceCalypso tenía una vida apacible en España, hasta que la tragedia la obligó a dejarlo todo atrás. Ahora, en las gélidas sombras de Canadá, se ha convertido en una mujer calculadora, guiada solo por la sed de venganza. Su única misión: hacer pagar a l...