Luces y Sombras en Hogwarts: El Camino de Amelie

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Este cap tiene pensamientos suicidas, y cosas que podrían afectar o incomodar a algunos lectores, si no te sientes comodo con esto temas por fa no leas el cap,además los siguientes capítulos ( por hay dos o máximo cuatro)hablaran de lo mismo y no quiero incomodarlos.
Estás advertid@

Dolor.

Desesperación.

Miedo.

Terror.

Furia.

Era lo que ambas sentían al recibir la marca tenebrosa, sentían como una serpiente clavaba sus colmillos en su su brazo y expulsaba un veneno que producía un dolor intenso, algunas lágrimas brotaban, pero, tenían que ser fuertes ya que si estaban pasando por eso en ese momento todo se complicaría con el pasar de los días.

Unas horas antes el señor Malfoy las había llamado a su oficina, al entrar vieron que estaba también Narcissa Malfoy con un expresión seria, se sentaron en los muebles de la habitación y esperaron pacientemente lo que los señores quisieran hablar.

— Astoria, Amelie — empezó  Lucius — las he llamado ya que debemos hablar algo importante con ustedes.

— Como bien sabrán, nosotros somos parte de los mortifagos, — continuo Narcissa — igual tu madre, Amelie.

— Hace 13 años, una profecía apareció — empezó a narrar el señor Malfoy — advirtiéndole a el señor tenebroso que un niño sería su perdición, claramente todos sabían que se trataba de el hijo de James Potter y Lily Potter.

" Y una noche llego a la casa de los Potter y los mato pero hubo alguien que sobrevio".

— Y ese fue Harry Potter — dijo Amelie interrumpiendo a su tío.

— Así es, cuando el niño entro a Hogwarts, el señor tenebroso lo intento matar nuevamente pero no pudo ya que no tenía suficiente poder — dijo Narcissa.

— Cuando el señor tenebroso desapareció hace 13 años todos sus aliados fueron llevados a Azkaban, pero nosotros no, ya que no tenían pruebas suficientes.

— Pero mi madre si — dijo la Lestrange tristemente.

— Así es — continuo el señor Malfoy — hoy las llame para que se unan a nuestras causa, los muggles deben de ser dominados por nosotros los sangre pura y todos tenemos que ayudar.

— ¿Y Draco? ¿Por qué no está aquí? — pregunto Astoria.

— Todavía no ha llegado su momento — aclaro Lucius — pero ustedes mis niñas han sido elegidas por nuestro señor para servirles con lealtad.

No supieron como de un momento a otro, pudieron ver a una figura encapuchada en una esquina de la habitación, cuando las llamo, las dos fueron inmediatamente sin tener control sobre su cuerpo, y, de un momento a otro las marcas ya habían sido puestas.

Había pasados una hora desde aquel suceso, las dos no sabían cómo habían sido capaces de llegar a la habitación de Astoria donde lloraron amargamente.

La noche llego y las dos se quedaron abrazadas mientras pensaban como su vida había cambiado tan repentinamente.

Cómo pasaron de tener una vida maravillosa, ser queridas por las personas a su alrededor y de poder disfrutar sin preocupaciones a tener una vida de miedo, frustración, ansiedad y muchas otras cosas más.

Al día siguiente se enteraron que Draco se había ido a la casa de uno de sus amigos por el resto de us vacaciones así que él jamás se enteró de lo que pasó.

Los días pasaron y Narcissa les explicaba como tenían que comportarse ante la sociedad para que nadie se enterará de su secreto hasta el momento adecuado.

Su vestimenta cambio, paso de ser eso lindos trajes de colores no tan llamativos a ser trajes y vestidos negros, sus caras donde antes habitaban una linda sonrisa y una mirada comprensiva había sido remplazada por una mirada sería y un expresión de asco.

Sus mentes reflejaban inseguridad,miedo, dolor y tristeza.

Astoria sintió un gran traición al ver que sus padres preferían verla morir antes que ella se reusara a ser mortifaga .

La mansión de un día a otro estaba lleno de mortifagos que se habían escondidos los últimos años o de nuevos reclutas.

Los comentarios de que ella no deberían que estar ahí sobraban, la mayoría eran hombres mayores de 35 años y no faltaba también comentario morbosos hacia ellas.

Amelie un día, intentando escapar de la triste realidad paseaba por la terraza de la mansión y mientras miraba al horizonte se dio cuenta que Astoria estaba parada allí en el borde, la vio en una mar de lágrimas y sabía tanto ella como Astoria habían sufrido todo es cambio, rápidamente  la apartó de aquel precipicio y sin pensarlo dos veces la abrazo y llorando junto a ella se quedaron un buen tiempo...

Maratón 4/5