Los Bridgerton: Vidas pasadas (Anthony Bridgerton)

La tarde en el club de caballeros

Una semana después, la ciudad de Londres estaba en pleno ajetreo. Los eventos sociales se sucedían uno tras otro, y la alta sociedad seguía ocupada con sus propias intrigas y romances. Los Bridgerton, por supuesto, no eran la excepción.

Una nueva columna de Lady Whistledown apareció en la mesa del desayuno de la familia, como siempre. Lady Violet Bridgerton desdobló el papel con cuidado, sus ojos escaneando rápidamente las palabras impresas con la habitual mezcla de curiosidad y aprehensión. Anthony, Benedict, Colin, Eloise y los demás estaban sentados a la mesa, esperando a escuchar las últimas noticias.

Londres, una ciudad de luces y sombras, de secretos y revelaciones. En el centro de este vórtice social, encontramos a nuestros queridos Bridgerton, cuyas vidas nunca están exentas de emoción. La semana pasada ha sido particularmente intrigante.

Para empezar, se ha hablado mucho sobre la inesperada reaparición de Elizabeth, nuestra encantadora bailarina, que ha causado más de un revuelo en ciertos círculos. Su relación pasada con un conocido vizconde sigue siendo tema de susurros y especulaciones.

El Conde de Sheffield, recientemente llegado a nuestras tierras, parece haber encontrado en Elizabeth una compañía más que agradable. Los dos fueron vistos disfrutando de un paseo íntimo y sincero, dejando a más de uno preguntándose si el corazón del conde ha encontrado ya su dueña.

Sin embargo, no todo es idílico en el mundo de los Bridgerton. La reciente confrontación entre Lord Anthony Bridgerton y el Conde de Sheffield en un conocido club nocturno ha sido tema de conversación en todos los salones. La intensidad de sus emociones no ha pasado desapercibida. ¿Podría ser que los sentimientos por Elizabeth aún ardan con fuerza en el corazón de Lord Bridgerton?

Con tantos corazones en juego y tantos secretos aún por descubrir, solo el tiempo dirá qué desenlace nos depara este emocionante drama.

Siempre observando, siempre informando,

Lady Whistledown

Violet terminó de leer la columna en voz alta, dejando un silencio cargado en la habitación. Todos intercambiaron miradas, intentando asimilar las implicaciones de lo que acababan de escuchar.

—Así que es cierto lo que dicen—dijo Eloise, rompiendo el silencio— Elizabeth ha perdido su trabajo por culpa de lo que pasó.

Benedict, con una sonrisa pícara, intentando cambiar de tema, no dejó pasar la oportunidad de reprochar a su madre.

—Mamá, ¿no eras tú quien dijo que no quería ver una columna más de Lady Whistledown en esta casa?

Todos rieron, incluyendo Violet, quien trató de disimular su interés.

—Bueno, una madre tiene derecho a cambiar de opinión —respondió ella con una sonrisa— Además, necesito estar informada para proteger a mi familia.

—Por supuesto, madre —dijo Colin, riendo— No te preocupes, tu curiosidad está justificada.

Violet se aclaró la garganta y cambió de tema rápidamente.

—Hablando de familia, he decidido que debemos hacer un viaje a la casa de tu hermana Daphne. Necesitamos reunirnos todos y ver cómo está.

Anthony frunció el ceño, su postura inmediata de rechazo clara. Se cruzó de brazos, estirando la columna en el respaldo del asiento.

—Prefiero quedarme aquí y cuidar de la casa.

—Anthony, es importante que vayamos todos —insistió Violet— Daphne estará feliz de vernos, y necesitamos un poco de tiempo juntos, lejos de todo este caos.