Hermosa Apuesta

Capítulo 2

SKYE

Esto no podía ser real.

Tenía que ser una pesadilla.

Me tomó algo de tiempo procesar lo que estaba pasando.

El compañero de piso de Dan había entrado al baño.

Yo estaba a punto de tomar una ducha.

Me había visto casi desnuda.

Me había caído llevándome la cortina conmigo.

¡Dios, quiero morirme! ¡Era una pesadilla!

¿En qué estaba pensando? ¿Cómo es que había olvidado poner seguro a la puerta?

En cuanto intenté levantarme de nuevo, volví a tropezar, Asher corrió hacía mí, dispuesto a ayudar a levantarme, sentí que sus manos se colocaban con cuidado sobre mi cintura y una vez que estuve parada, me aferré a las cortinas para impedir que estas cayeran y revelara parte de mi cuerpo.

─¿Estás bien? ─Preguntó con algo de preocupación en él, me tomó unos segundos asentir a su pregunta.

─Lo estoy ─conseguí decirle y después hubo un pequeño silencio entre los dos, pero tan pronto como reaccioné ante la situación, me sentí molesta─. ¡¿Qué rayos estabas pensando?!

Me quejé hacia él, su ceño se frunció al no entender qué estaba pasando y porque mi cambio de humor, pero en cuanto captó que le estaba gritando, Asher se enojó.

─¿Qué si qué estaba pensando? ¿Qué estabas pensando tú? ¡No le pusiste seguro a la puerta!

─¡Porque pensé que nadie iba a entrar! ─Era una excusa tonta, lo sabía bien, pero quería decirle que olvidé ponerle llave a la puerta.

─Eso es tonto.

─Tú eres tonto. ─Solté con enfado─. ¿En qué estabas pensando? No te creo que no hayas notado que no había nadie en el baño.

─¡No lo sabía! ─Insistió.

─Eres un mentiroso.

─No soy un mentiroso.

─Sí, lo eres.

─En ese caso, eres una loca.

─¿Hablas en serio? ─le cuestioné levantándole las cejas─. Tienes que estar de broma.

Negué para mis adentros.

─Pienso lo mismo, es una locura que intentes culparme de algo de lo que no tenía ni idea.

Bueno, tenía un punto y tenía razón, no sabía que de repente las cortinas iban a caer al mismo tiempo que yo, pero aun así me sentía cabreada por el hecho de que entrara en el baño mientras yo estaba en la ducha.

Apreté los labios con fuerza y solté un bufido.

─Deberías salir. ─Dije cerrando los ojos, intentando controlar mis sentimientos. Ahora mismo era una montaña rusa de emociones.

Asher no dijo nada, pero he oído sus pasos mientras se dirigía a la puerta, he oído cuando la abría y la cerraba segundos después. Una vez supe que estaba sola en el baño abrí los ojos.

Este ha sido un encuentro de locos.

Una risa seca salió de mí.

Quizá vivir con mi hermano y su compañero de piso fuera una mala idea. pensé, pero intenté no pensar mucho en ello.

***

Diez minutos más tarde, después de cambiarme e intentar arreglar las cortinas del baño, me tumbé en la cama mirando el techo blanco.