ASHER
Sabía que era una mala idea besar a Skye en aquel lugar, sin embargo, había tenido un mal día, estaba estresado por todo lo que había pasado en el partido y verla hablar con aquel chico que nos había hecho perderlo todo en el hielo y quien además era su ex, me había dejado un poco malhumorado y deseaba poder distraerme un rato, aunque no estaba besando a Skye como distracción porque de verdad deseaba hacerlo, no había podido sacar de mi cabeza nuestro beso, además, ya llevaba más de tres cervezas a pesar de que había dicho que no iba a beber demasiado.
Así que culpaba en parte a mis cambios de humor y el alcohol en mi sistema para que no hubiese sido consiente del lugar en donde estábamos y que estaba besándola.
Enredé una mano en su cabello con la intención de atraerla más a mí y profundizar nuestro beso, en cuanto nuestras lenguas se rozaron, supe que no iba a tener suficiente de ella, quería gastar sus labios besándola si eso era posible, quería saciarme de su boca, sabía tan bien.
La besé hasta dejarle los labios hinchados y sentir que me faltaba la respiración y terminé uniendo mi frente contra la suya.
─¿Qué estamos haciendo?
Susurré, un ligero gruñido salió de Skye. Me incliné de nuevo para rozarle los labios, pero esta vez no la besé, solo fue un simple roce de nuestras bocas.
─Asher...
Susurró. Le acaricié el labio inferior con el dedo índice, quería volver a besarla, era tentador, pero era consciente de que estábamos en la casa de los chicos, Dan o cualquiera del equipo, más bien, cualquier persona en esta fiesta podía entrar en cualquier instante y vernos besándonos.
Era peligroso.
Skye era peligrosa, tentadora y definitivamente me gustaba eso.
Me gustaba Skye.
─Alguien podría vernos.
Al menos también era consciente de las cosas.
─¿Tienes miedo?
Pregunté y volví a acariciarle el labio con la yema de mi pulgar, le tembló un poco y sus ojos se encontraron con los míos, me gustaba la forma en que me miraba.
─Las probabilidades de que Dan aparezca son enormes.
─Lo sé.
─Estaríamos en problemas los dos.
─Lo sé.
Pero decidí ser un ignorante y volver a besarla de nuevo, era arriesgado más no iba a quedarme conforme si no la volvía a besar. Agradecí que respondiera el beso de inmediato, estaba casi seguro de que mi atracción por ella era mutua.
Ambos escuchamos risas cerca, lo que hizo que los dos nos apartáramos de golpe y pusiéramos una gran distancia entre los dos y compartimos una mirada aterrada.
Por suerte, Tobías y Declan entraron.
─¡Ey, chicos! ─Exclamó Tobby con demasiado entusiasmo, podía ver que estaba un poco ebrio─. ¿Por qué están aquí? ¿por qué no van a divertirse con el resto?
Inquirió, una mirada rápida en dirección a Skye me demostró que se tensaba más de lo normal.
─Solo estábamos buscando algo de beber.
Hablé buscando el vaso con vodka que me había servido, sin embargo, tardé un tiempo en encontrar donde lo había dejado, Tobby enarcó las cejas y ocultó una sonrisa, Declan no dijo nada.
─¿Ya no hay cervezas?
─Se han acabado.
Hablé, pues la última vez que había revisado el refrigerador ya no quedaba ninguna.
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Hermosa Apuesta
Novela JuvenilAsher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel. Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la ch...