IMPERIO DE MENTIRAS.[1]

Capitulo 26.

Angelic.

"Mente ocupada no extraña a nadie." Esa frase se plantó en mi cabeza. Necesitaba una distracción sana y esa era estar en casa de mi familia. Después de mi sesión de llanto en el Jeep hice una maleta expréss, corrí casi de inmediato a casa para pasar la noche del viernes ahí. Patt y Jordan se extrañaron de mi actitud por lo que cambié el tema a invitarlos a pasar el fin de semana en la piscina de casa.

Ese plan era algo que ellos no se negarían, por lo que llegarían en la tarde del sábado.

Estuve lo bastante ocupada acompañando a mi hermana a clase de pilates el sábado por la mañana. Lo que fue un infierno para mi, yo estaba acostumbrada a algo más tranquilo. No ha intentar ser Elastigirl. Isabelle se lo tomaba con calma en cada ejercicio mientras que yo moría lentamente.

Gracias al cielo el sufrimiento se terminó y al finalizar la clase me llevo almorzar.

—Me duele el culo.— admití intentando buscar una postura cómoda.

—Tranquila princesa, tu cuerpo se debe adaptarse a los ejercicios.— dice entre risas Isabelle mientras que quita las gafas de sol.

—Créeme, esta es la única vez que voy a ese lugar. Prefiero cargar pesas antes de volver hacer esos ejercicios del demonio.

Nos entregan nuestra comida y comenzamos a comer. Yo hasta ahora no tengo apetito, pero debo comer o Isabelle comenzará con sus preguntas.

—Me enteré que comenzaron las elecciones en Vermont. ¿Cómo va la cosa?.

—De la mierda, no le encuentro sentido al hacer unas elecciones cuando la única candidata es Margot Faure.

—Se debe hacer por protocolo, a ella no la eligieron como rectora. Debe quedar registro de ser elegida.

—¿Cualquiera puede ser candidato?.— Isabelle asiente mientras bebe de su café.

—Cualquiera que tenga el conocimiento y el dinero para dirigir la universidad más prestigiada del mundo.

—Odio el dinero, el poder...

—No siempre es malo, cuando le das un buen uso. Como por ejemplo nosotras, tenemos dinero y poder, pero no lo usamos para hacer mal.

—Lo usaron cuando decidieron tenerme a mi cerca.— me suelto a reír y ella me da un pequeño golpe.

Después de nuestro almuerzo fuimos al supermercado a comprar varias cosas para mi tarde con Patt y Jordan. Botanas, dulces, alcohol y analgésicos. Isabelle me llevo a las tiendas del centro para buscarse algo de ropa. Pero se le atravesaron varios bikinis para mi. Así que después de pagar nos fuimos a casa.

Isabelle preparó todo para la corta estadía de mis amigos en casa, le pidió a Janeth que preparara los cuartos de invitados para ellos. Al igual que una comida de bienvenida. Me quede platicando con Janeth en la cocina sobre su vida y su familia. Las horas se me pasaron súper rápido sin darme cuanta. Ya era media tarde y yo seguía con la ropa deportiva que olía a loquito del centro. 

—Cielo, ¿por qué no subes, tomas una ducha y te pones uno de los bikinis que te compre?. Patt y Jordan no tardan en llegar.