Capítulo 13.

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Angelic.

Por fin el viernes había llegado lo que significaba el fin de mi primera semana en Vermont.

Tras lo sucedido con el batido y mi ropa no sucedió nada con respeto a mi "marca" del beso de la muerte, asi que con mucha tranquilidad regresé a casa a pasar el fin de semana con Isabelle y Grace.

Por su parte Patt le inventó a sus madres que estaba cargado de tarea como excusa para quedarse en Vermont, mientras que Jordan solo decidió no mirar las excesivas llamadas de su madre.

Una vez dentro del territorio Magnus visualice a Isabelle quien ya me esperaba en la puerta de entrada.

No podía evitar sentirme feliz de verla, a pesar de llevarla conociendo pocas semanas me había tratado como si me conociera de toda la vida.

Corrió hacia mi Jeep para abrir la puerta y abalanzarse sobre mi en un abrazo.

Beso mis mejillas y me ayudo a salir.

Mantuve una agradable conversación con Isabelle al llegar, de la misma manera me recibió con una grata comida que ella misma había preparado.

En el transcurso de la comida le platiqué sobre Patt y Jordan, al igual de cómo me había encantado la carrera que ha iba elegido.

Desde siempre desee convertirme en abogada y por casualidad Grace era una.

—Tuvo una reunión de me emergencia con un cliente, por lo tanto estará el fin de semana fuera,— me regaló una sonrisa picaron.

—¿Ella sola se encarga de los casos?.

—Desde que mi padre murió ella ha llevado la administración sola, pero suele ceder los casos a otros abogados y eso le cuesta mucho trabajo a pesar de los años que lleva en esto.

Me contó sobre su padre, el cual había fallecido apenas unos años atrás.

De la misma manera sobre el el bufette de abogados que ellos se habían dedicado hacer que creciera. Comenzó una extensa historia de cómo se conocieron sus padres, como de tener nada lo tuvieron todo y los distintos negocios que manejaban ella y Grace.

—¿Diseñas vestidos de novia?.— asintió.

—Funde belles mariées después de la muerte de mi hermana, ella siempre se quiso casar y yo...

Se quedó callada y cambió el tema.

—Cambiando de tema, ¿ ya conociste a los hijos de Alek?.

El mal sabor de boca apareció.

—Si, a los tres y digamos que el internet no miente son como les describen.

—Te lo dije, sobre todo Adonis últimamente esta metido en varios temas que circulan en Beaumont.

Recordé el tema sobre el Inferno.

¿Sabes que es el Inferno?.— asintió dejando su comida de lado.—al parecer los hermanos Faure tienen algo que ver con eso.

—Es un club nocturno, tal vez son clientes recurrentes.— negué.

—No. Estoy segura que hay algo detrás.

La expresión que puso Isabelle fue como si un pensamiento llegó repentinamente a ella tras levantarse rápido yendo a la oficina de nuestra madre.

Tomó asiento en el escritorio en el cual permanecía el ordenador.

En un ágil movimiento lo activó, se fue hacia los archivos hasta darle clic a varios documentos los cuales desplegaron demasiada información.

—¿Qué es eso?.— pregunté y ella me calló.

IMPERIO DE MENTIRAS.[1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora