Gizel Rodriguez,sabiendo que no sabe absolutamente nada de futbol y su amiga Isabella sabe al 100% cada uno de los detalles de los jugadores en cada uno de los partidos qué hay.
Ambas se van a la copa america, sabiendo que puede ser posible o imposi...
El viaje había sido extenso, una que otra turbulencia, pero habíamos llegado a Estados Unidos.
—Waaaa~—mire todo asombrada mientras daba vuelta con la maleta
—Hey hey, cuidado—Isa agarro mi mano mientras reía ya que me había mareado un poco.—Muy bien, iremos al hotel a dejar nuestras pertenencias y directamente nos iremos al juego—Isa chequeo su teléfono para luego mirarme.
Ante lo que había dicho asentí suavemente para ver cómo ella empezaba caminar hacia la salida del aeropuerto. Por lo qué la seguí, la verdad que este se encontraba full y más por que habían muchos aficionados tanto de Panamá como de Colombia.
—¿Toda esta gente viene es por la copa América?—le pregunte a Isa mientras miraba las camisetas de la selección tricolor.
—Clarooo Gizel, entiende. Tanto la Eurocopa y copa América, es muy esperada por la gente—se volteó para agarrarme la mano ya que había mucha gente y ya por fin habíamos salido del aeropuerto.—Aunque sea cada 2 o 4 años si no me equivoco, la gente ahorra para ver a sus ídolos. Como lo es los dos Goats tanto Messi y Cristiano.—sonrió Isa para levantar la mano y parar el taxi—Ahora sube, que el día de hoy será largo—como pudo subió la maleta Isa para hacerme algo de espacio.
Con cuidado también agarre la mía y la subí con cuidado para cerrar la puerta.
Ella intercambió una que otra palabras con el taxista, para luego ver cómo arrancaba el auto. La ciudad de New York es muy linda, como pude tome una que otra foto.
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Luego de varios minutos ya habíamos llegado al hotel, Isa y yo le agradecimos aún más Isabella que yo al taxista para entrar, siendo recibidas por el portero quienes nos ayudo a entrar con las maletas.
—Espera aquí iré hablar en recepción.—Isa me dejo su bolso y agarre este para asentir,me quede allí para viendo como ella llegaba hasta recepción intercambiaba una que otras palabras con la recepcionista.
—Si, pero ya dejad de molestar oyeee—sin querer un chico choco contra a mi haciendo que se cayera mi teléfono.
Rápidamente lo recogí notando este con la pantalla partida y sabía que me iba hacer difícil desbloquearlo ya que no tenía el Face ID activado.
—Joder...—susurre para mi misma aún en cunclillas.
—Oye lo siento, no te vi. Discúlpame—el chico también se agacho para poder agarrar mi teléfono.
Lo mire un poco de reojo notando que tenía una camiseta con el número 24 en ella. Venía con los tacos esos de púas, las medias hasta las pantorrillas, su pelo estaba algo cortado y recién mojado, tenía una sonrisa característica y por lo visto, muchos tatuajes.
—No te preocupes, mhmm. No pasa nada, le dire a mi amiga a ver si me compra otro—me encogí de hombros para que el chico no se sintiera mal. Ambos nos levantamos.
