Jenner's princess ; the Jenner Sisters

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ALEXA SMITH

Abrí la puerta de mi apartamento con el palo de escoba en una mano, una venezolana con sus manos en la cintura y cartera Chanel en el hombro estaba delante de mi devorándome con sus ojos.

— ¿Quién te crees que eres para no contestar mis llamadas? — me hizo a un lado y entró a mi hogar como Pedro por su casa. Cerré la puerta y la seguí a la sala donde estaba sentada con las piernas cruzadas.

— Estoy limpiando — señalé el lugar como si fuera obvio.

— Ajá ¿y? — solo suspiré y me senté junto a ella dejando la escoba recostada en la pared — Mañana te vas para Cuba — asentí sintiendo la emoción recorriendo mi cuerpo — ¿Tienes todo listo?

— Oh, por supuesto, llevo comida, productos de aseo, ropa para mi mamá y otras cosas que creo que les van a gustar — hablé enumerando con los dedos las cosas que llevaría — y como no me cabía todo en las maletas, mandé varias cosas primero por paquetería.

— ¿Y para ti? — preguntó.

— una que otra muda de ropa — respondí como si nada y Victoria casi me mata con esa mirada que me dió.

— Necesito ver tu maleta — se paró del sofá y se dirigió a mi clóset haciendo resonar sus zapatos contra el piso que recién terminaba de barrer.

Una vez llegué a mi habitación, la venezolana estaba sacando toda la ropa que tenía doblada de mi maleta a la vez que negaba y maldecía.

— ¿En serio? — volteó y me enseñó la ropa que tenía en ambas manos — Esta incluso tiene un hueco, Alexa — bramó señalando un vestido rosado.

— Es la mejor que tengo — contesté recogiendo el desorden que había dejado por todo el piso.

— ¡La mejor! — gritó e hice señas para que hablara bajo — ni mi peor ropa de ve así — no le importó y siguió gritando. Tiró todo de nuevo en la cama y agarró mi mano — Ahora mismo, tú y yo iremos a mi casa y buscaremos una ropa adecuada para tu viaje. ¡Coño Alexa, vas de vacaciones no a un trabajo social! — lo último lo expresó con enojo en español.

Safé mi mano de su agarré y negué — Estoy bien con esto — hablé — en serio muchas gracias, pero no es necesario.

— Oh, claro que no — ahora ella fue la que negó — primero muerta a que vayas así a tu país a ver s tu familia que piensan que vives como uns reina. Porque no creas que no se que casi todo el dinero se los mandas y te quedas con lo mínimo — la miré sorprendida — así que andando que pa' luego es tarde.

Su casa es realmente bella, llena de lujos por cualquier lugar que mires, llegué a pensar que si seguía trabajando duro en algún punto de mi vida podré alcanzar algo como esto y tal vez compartilo con una pareja.
Su cuarto era inmenso, hasta creo que del tamaño de mi apartamento pero nunca como la casa de Kylie Jenner, esa si es una mansión con todas las letras.

Estaba sentada en el borde de su cama, muy suave por cierto, viendo como la venezolana entraba y salía de su closet que más bien parece una habitación a parte, cada que salía lo hacía con sus manis llenas de ropa, zapatos o carteras, se pasó practicamente una hora de un lado a otro hablando con ella misma ignorando mi presencia.

— ¡Listo! — exclamó después de tirar una cartera al montón de ella sobre la cama, una más y me tendría que sentar en el piso porque no había espacio — Ahora vamos a armar las opciones para el viaje — me tomó de las manos y me aló parándome de la cama y poniéndome a su lado — Siempre quise hacer esto — dijo emocionada haciendo un mini bailecito.