La que sueña con Beethoven

Capítulo 5

Me levante muy temprano y me dirigí aun en pijama al salón donde estaba el piano, primero lo rodee, era hermoso. Después me senté en el banco y puse mis pies en los pedales.

— Elisa - Me llamo mi padre saliendo de la cocina.
— Papá ¿Qué haces? - Pregunté.
— Vine a tomar agua ¿tú que haces?
— Vine a ver el piano...
— Elisa, Elisa - Dijo sonriente. — Hoy vendrán tus tíos y tías y no podrás tocarlo, pero yo te ayudare para que puedas disfrutarlo, sólo espera, ahora ve a cambiarte y arreglarte. - Me pidió y le hice caso.

Mi padre era muy alegre y siempre he sido su consentida, él siempre hacia lo posible por darme todo y eso se lo agradecía con todo mi ser. ¿El mejor padre del mundo? Erick Montiel, sin dudarlo.

Me di un baño y me puse uno de los pocos conjuntos de ropa que había traído, me mire al espejo y de pronto en vez de traer unos jeans y una blusa, tenia puesto un gran vestido esponjado de volantes amarillo, en vez de tener mi cabello suelto y despeinado tenia un recogido elegante y muy elaborado, en vez de tener el rostro lavado lo tenia con un poco de maquillaje, en vez de estar sola en una habitación a mi lado estaba mi compositor favorito Ludwig.

— ¡Que bella se ve mi aprendiz estrella! - Exclamó.
— Gracias Ludwig - Sonreí.

Él tomo mi mano y esta fantasía desapareció, abrí los ojos y era otra vez yo, la sencilla Elisa.

— Elisa, ayudame a subir la cremallera- Dijo mi madre entrando a la habitación.
— Sí, mamá - Le respondí.
— ¿Vas a usar eso? Debe de ser una broma, niña... - Me miro con cara de enojo.
— Me siento cómoda usando esto - Me defendí y lo lamente enseguida por que mi madre me solto un golpe en la cabeza, ella llevaba un vestido azul corto y unos tacones con los que apenas podía caminar.
— Por suerte traje este vestido para ti- Dijo mostrándome un vestido que ella me había comprado hace un tiempo, pero nunca había usado.
— Mamá, esa ropa no me gusta.
— Elisa ¿Cuando crecerás y verás la vida como en verdad es? Este vestido me costó muy caro, tuve que ahorrar por meses para comprartelo. En esta familia nos ven como si fuéramos nada, así que tienes que aparentar que nuestra vida no es tan mala como ellos piensan. Aprende esto "Como te ven, te tratan"- Me explicó.
— ¿Qué esta pasando? Intento ver la televisión - Dijo mi padre entrando a la habitación.
— ¿Televisión? - Pregunté.
— En la habitación que nos dio tu abuela hay una pantalla gigante - Dijo entusiasmado.
— ¡Quiero verla!- Exclamé entusiasmada.
— ¡Elisa! - Grito mi madre — Ponte esto y punto - Salio de la habitación enojada.
— Papá...- Dije con un nudo en la garganta.
— Hazle caso, sabes que a ella no le gusta que nos miren como los pobres de la familia, ponte lo que ella te dijo. Debo decirte que tambien eligio mi ropa - Lo observe y llevaba su mejor conjunto de prendas.
— Esta bien, papá.
— Sabes que ella a veces no sabe decir bien las cosas, a veces es muy dura, pero entiendela, es tu madre. - Me dijo acariciando mi cabello.
— Gracias papá, tú eres el mejor.

Mi padre salio de la habitación y me cambie de ropa.