Capítulo 97

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Al abrir los ojos mire un techo blanco y junto a mi, Isabel. Sentí un gran dolor en cada parte de mi cuerpo y me exalte al recordar que Elizabeth era quien me acompañaba.

- ¿Donde esta Elizabeth?- Pregunté preocupado.
- Mi amor... Tranquilo, ella está bien, ella está fuera de peligro- Respondió y sentí un gran alivio- Sus heridas son menores, tu fuiste quién sufrió un gran impacto, pero me alegra mucho que hayas despertado.
- ¿Qué pasó?
- Perdiste el control del volante y te estrellaste en el muro de contención.
- No recuerdo nada de eso- Respondí.
- Lo bueno es que estás vivo y agradezco mucho eso, estaba tan preocupada por ti mi amor, te amo tanto- Isabel me besó- Por cierto, tu madre está en la sala de espera, la llamaré para que entre a verte- Dijo Isabel y salió.

Cuando mi madre entró a la sala no pude evitar recordar lo que Elizabeth me había dicho ¿A caso era cierto?

- Hijo ¿Cómo te sientes?- Pregunto mi madre.
- Me siento muy adolorido mamá ¿Y tú cómo te sientes?
- Muy estresada por todo lo que tengo que hacer con los negocios...
- No hablaba de eso, me refería a como te sientes después de haber matado al amor de mi vida, Elisa Montiel ¿La recuerdas?- Pregunté.
- ¿Qué estás diciendo hijo?
- Tu mataste a Elisa y ahora lo sé, tu interés pudo más que tu amor hacia mí, porque sabías que yo sentiría mucho dolor sin ella a mi lado y aún así lo hiciste ¡Te odio!
- Hijo, te salve de la ruina con esa mujer ¡Yo quería a María para ti! Ella era hermosa y una modelo muy exitosa, eso era lo que tú necesitabas, no una pianista ni una bebé- Respondió.
- ¿Por qué me hiciste eso?
- Porque no quería que arruinaras tu vida, el amor no lo es todo Ryan, hay cosas más importantes...
- Madre, te odio tanto... Te odio tanto- Dije.
- No te preocupes, solucionare lo que hice- Me explicó.
- ¿Cómo harás eso? No puedes volver a la vida a Elisa.
- No, pero te enviaré con ella- Dijo mientras inyectaba algo a mi suero- No te preocupes Ryan tendrás el suficiente tiempo para despedirte de tu esposa y de Elizabeth, ellas entrarán después de mí.
- ¿Qué pasará con ellas cuando me vaya?- Pregunté preocupado.
- Elizabeth será mi heredera en todo, mientras me quedaré con todos tus negocios- Respondió.
- ¿Juras que cuidarás de Elizabeth?
- Lo juro Ryan...
- Eres tan ambiciosa madre, yo sé que nunca me quisiste, si estuviste conmigo este tiempo solo fue por interés y ahora que ves la oportunidad decides deshacerte de mi, te odio tanto mamá...

Mi madre salió de la habitación y tal como había dicho, entró Elizabeth e Isabel.

- ¡Papá! Estaba tan preocupada por ti, te quiero tanto- Dijo Elizabeth al entrar.
- Hija mía, me alegra que estés bien- Sonreí- Ahora veo que lo que dijiste era cierto Elizabeth, perdón por gritarte y alterarme, tu solo decías la verdad.
- Sí, papá todo me lo dijo Ludwig- Aseguró.
- Hijita espero que el viaje que hicimos te haya ayudado a conocer a tu madre, ella era la persona más buena de todo el mundo, tenía un corazón muy grande, ella no guardo rencor y no había maldad en su mente, solo procuraba ser buena y bondadosa con los demás. Te aseguro que si eres como ella serás muy feliz y las personas que quieres también lo serán, por favor sé como tu madre- Le pedí.
- Siempre lo seré papá, tú me ayudarás a lograrlo todos los días- Sonrió.
- Si tuviera que partir hoy, solo te pediré que nunca olvides a tus padres y que cuides a Isabel, mi amada esposa.
- ¿Por qué me pides eso?- Pregunto confundida.
- Suena a qué te estás despidiendo- Dijo Isabel.
- Isabel, perdón por hacerte sufrir... Sé que en todo lo que duró nuestro matrimonio te sentiste menos que Elisa, pero tú también eres una gran mujer y tienes un corazón muy bueno ya que siempre quieres ayudar a los que te necesitan y gracias a ti adoptamos a muchos niños que necesitaban una familia, por favor cuida a Kimberly, a Elizabeth, a Jacob, a Freddy y Dina- Le pedí.
- Mi amor ¿Por qué me pides eso?- Preguntó.

De pronto perdí el control de mi cuerpo y comencé a gritar.

- ¡Elisa, Elisa, te amo!- Grité.

Todas las máquinas comenzaron a sonar

La que sueña con BeethovenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora