20. Permiso

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Ha pasado una semana desde que hable con mis padres, sigo esperando por ella, he de admitir que la paciencia no siempre es mi fuerte y llevar casi un mes sin saber nada de Samanta está haciendo que esta llegue al límite, tanto que he decidido ocupar mi mente lo más posible, bueno eso lo hago desde que regrese a casa de mis padres, empecé a acompañar a mi papá a correr con Max, cuando regreso me uno al entrenamiento que hacen mis hermanos, mis padres les compraron un par de cosas para tener un pequeño gimnasio en el jardín trasero de nuestra casa, al finalizar, práctico con Alexander kickboxing o bueno él me enseña lo que sabe, ya que se está convirtiendo en un experto en su deporte, su sueño es convertirse en peleador profesional, está de más decir que me patea el trasero en cada clase que me da, yo termino tan cansada y adolorida que el resto del día ya no tengo energía para ni una actividad más, solo me dedico a pasar tiempo con mi madre, platico con las chicas, leo, veo series y escucho música, lo único positivo en todo esto es que si sigo haciendo ejercicio de esta manera, tal vez por fin conseguiré marcar mis abdominales para las vacaciones de verano que tendremos con mi familia, eso sería genial, ya que llevo mucho tiempo intentándolo, esta vez nuestro destino será Cancún, creo que le pediré a mis padres que también me compren algunos aditamentos para que me pueda seguir ejercitando cuando regrese a clases nuevamente; decido ponerme a ver mis redes sociales, pero no encuentro nada interesante, así que mejor decido ponerme a organizar algunas fotos en mi celular, al abrir mi galería veo varias que le tome a Max en nuestro último paseo, después me encuentro con las fotos que las chicas y yo nos tomamos en nuestra última fiesta, tenemos varias en grupo y tengo una con Sam, es nuestra primera foto individual, se ve tan hermosa... suspiro y mi corazón se agita por su recuerdo... ahí voy de nostálgica de nuevo...

Estamos a poco más de dos semanas de que acaben las vacaciones de verano... llevo casi un mes en casa de mis padres, todo ha ido sin drama, seguí mi propio plan y le he hecho caso a mi padre en todo lo que me ha pedido, por las mañanas tengo que dedicarme a ayudarle a mi madre con todas las tareas de la casa para que todo esté en paz, cuando llega la hora del desayuno, la comida o la cena entre ella y yo atendemos a mi padre y hermanos, realmente esa es la parte que más odio de todo esto, que mis hermanos se la pueden pasar sin mover un dedo todo el día si quieren, es tan injusto, ¡son unos inútiles!, pero me tocó nacer en una familia machista y ni modo, tengo que aguantar hasta que obtenga mi título, en cuanto eso pase me voy a largar de este maldito lugar y si mi madre por fin es lo suficientemente valiente para dejar por fin a mi padre me la llevaré conmigo, de los dos ella es la única que me demuestra su amor, no puede hacerlo todo el tiempo porque mi padre se enoja, pero cuando puedo tener buenos momentos con ella son como un tesoro para mí.

Estoy en mi habitación escuchando música y pensando en Ari... mi bella criatura... es una mujer realmente fascinante, me encanta todo de ella, siempre tiene pláticas tan interesantes, es tan culta e inteligente, no me canso de escucharla, su forma de tratarme es lo que más me gusta, también me cuida y desde aquel fatídico día en que conoció a mis padres le empecé a tomar cariño, pero estoy muerta de miedo de iniciar algo nuevo con ella, la última vez que me abrí a alguien mi corazón salió lastimado y eso que esa chica no me hacía sentir ni la décima parte de la emoción que tengo por Ari, es por eso que decidí tomar mi distancia, necesito probarme a mí misma que puedo estar sin ella, llevo estas semanas sin saber absolutamente nada de ella, tuve que dejar de lado mi celular para no caer en la tentación de ver lo que sube a sus redes sociales, pero mi corazón no está cooperando, está en agonía, la punzada de dolor que siento desde que deje de ver a Ari no ha cesado, cuando estoy con ella es como si... dos corazones latieran dentro de mí... exactamente así como dice la canción que escucho de fondo de la banda Fobia, tengo que dejar de hacerme tonta, realmente no puedo estar sin Ari, la extraño creo que ya tome suficiente tiempo para pensar en nosotras y sigo llegando a la misma conclusión, tengo que darme una oportunidad con ella, ya me lance al abismo una vez, qué más da hacerlo por alguien que me ha demostrado una y otra vez que vale la pena el riesgo, además ahora que ella está soltera podría conocer a alguien en el camino y podría perderla para siempre...

Chispa de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora