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Takami miraba su hermoso brazalete, era precioso y le quedaba muy bien, esperaba a su prometido quien estaba tratando los últimos detalles de la boda, se casarían muy pronto y aunque eso no le gustaba a Keigo, sabía que no podía hacer nada.

Cuando Touya regreso a su lado me dijo que debían hacer una visita rápida, tomó la mano del rubio y manos subieron al auto que era conducido por una persona que Touya había contratado, durante el trayecto el pelinegro no dejaba de halagar la belleza del rubio, eso incomodaba a Keigo pero simplemente le sonreía. Tardaron un tiempo en llegar y cuando el rubio reconoció aquel lugar sintió algo de miedo, era el lugar en donde Tenko le había dado un confuso consejo.

Entraron a aquel lugar el cual estaba lleno como la vez pasada pero Takami cerró sus ojos evitando ver aquellas horribles escenas, llegaron hasta la oficina del amigo del pelinegro y al entrar vieron a Tenko entre los brazos de su esposo, Keigo aún sentía escalofríos.

— Touya, que gusto verte — dijo aquel hombre — Ya me llegó tu invitación, yo sabía que ustedes tenían algo más que una amistad.

— Ya sabes cómo son estás cosas, tengo todo listo para la boda, Keigo y yo estamos bastante felices — Touya beso la mejilla del rubio.

— Tenko amor, ve con Keigo a otra habitación, yo tengo asuntos importantes que atender — dijo All For One, no sin antes besar al menor.

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— Lo lograste Keigo, déjame felicitarte — Tenko le sonreía al rubio — Créeme que no te vas a arrepentir, ahora todo lo de ese hombre será tuyo.

— Tenko… él quiere que le dé un hijo…

— Toma anticonceptivos sin que él lo sepa, eso hago yo, aunque cuando mi esposo me llevo al médico tuve que pagarle para que le dijera que yo no era fértil — confesó el de ojos rojizos — aunque una vez quedé en cinta pero tuve que deshacerme de ese hijo, no quería arruinar más mi vida.

— Tu no sabes lo mucho que quiere un hijo pero no entiendo por qué… todos saben que nuestra boda no es más que pura imagen así que no entiendo.

— Fácil, mi esposo le dijo que si no tenía un descendiente seguramente se sabria la verdad.

— ¿Qué verdad?...

— La que tú y yo sabemos, que esos hombres aman a los menores, ya se rumorea que Touya tiene esa clase de gustos y para limpiar su imagen te propuso matrimonio y si tienen un hijo la imagen de Touya sería la de un padre ‘preocupado’, todos hacen lo mismo.

— Pero no quiero, no quiero tener el fruto de un engaño en mi vientre — Keigo no se sentía sorprendido, sabía que su matrimonio no era más que pura imagen.— Tenko, por favor dime lo que sabes… ¿Qué fue lo que hizo Geten para que Touya lo dejara?.

— No te recomiendo que hagas lo mismo, te arruinarías a ti mismo.

— Por favor dime…

— Geten lo desobedeció de una manera en la que tú no podrás — Tenko sonaba serio — Geten quedó en cinta cuando Touya recién comenzaba a ser importante, eso le arruinaría la carrera así que lo obligó a abortar a ese niño, era asqueroso ya que se rumoreaba que eran familia, después pasó algo que nadie supo pero debió ser algo grave ya que Geten término muy herido y Touya lo dejó aquí, básicamente lo vendió a este lugar.

— Eso es horrible, me siento algo inquieto… Quisiera ver a Geten.

— ¿Enloqueciste?, no hagas una tontería o créeme que te vas a arrepentir, deja ese asunto en paz y concéntrate en el futuro… muy pronto serás el esposo de Touya.

— No sabes lo mucho que eso me atormenta — respondió el rubio mientras miraba al contrario.

— Serás dueño de su fortuna, eres mucho más joven que él así que cuando él muera tu te quedarás con los frutos de su trabajo, te darás la gran vida, eso es lo que yo estoy esperando… de algún modo la vida nos recompensa — Tenko palmeó ligeramente el hombro del rubio — ¿Qué edad tienes?, sospecho que eres más joven de lo que pienso.

— Tengo catorce años…

— Yo tenía la misma edad cuando llegué aquí, te ves mucho más joven, tu rostro es igual al de un niño pequeño, eso es bueno, jamás vas a envejecer — bromeó Tenko.

— Tú te conservas muy bien…

— Te lo agradezco, si quieres podemos dejar de hablar de este tipo de cosas y animarnos un poco, ¿Qué te parece si salimos a otro sitio?.

— ¿Salir?, Touya no me permite salir si no es con él… — Keigo no evitó sentirse tan asustado — Dudo que me deje salir…

— Touya hace todo lo que mi marido le ordena, así que si yo le insisto a mi esposo en salir contigo, no le quedará de otra a Touya que aceptar, ¿Que dices?...

Put Me in a Movie / DabiHawks Donde viven las historias. Descúbrelo ahora