Instinto primario (Chestappen)

Familia

POV: Max

Cansado, estaba cansado.

Este último mes transcurrió demasiado lento para mi gusto. Las cosas no han sido tan fáciles como pensaba que serían luego de haber roto la maldición de la Luna, aunque claro, es mi culpa por pensar que algo en esta vida iba a resultar fácil, la buena noticia es que los animales habían vuelto.

Toda especie que estuviera dentro de nuestra dieta había regresado, incluso algunos animales que creímos extintos habían reaparecido en el clan Accalia, por lo que nuestros días de comer pescado y pequeñas aves quedaron en el pasado, ahora éramos una manada rica en fauna y flora, la envidia de cualquier manada. 

Para mi buena suerte, tanto el clan Ragnulf como Marrock aceptaron mi liderato por completo, esta vez sin trabas ni opositores, por fin me había ganado su total confianza, ya no era más un intruso que intento "usurpar" el puesto de Charles, ahora era el lobo que los había salvado o lo que sea, honestamente no puedo creer que tuviera que ejecutar a alguien en sus caras para que aprobaran mi presencia como líder, aunque sinceramente hubiera preferido que siguieran odiándome, así le hubiera dejado el puesto a cualquier idiota que tuviera la valentía de tomar este trabajo tan exigente.

Lamentablemente una vez que toda una manada te acepta y te respeta ya no hay vuelta atrás,  sin embargo, estos últimos días me han dejado en claro que el trabajo de ser Igolf de tres manadas solo era ideal para un lobo soltero adicto al trabajo y alérgico a los momentos pacíficos, prácticamente alguien inexistente, por ello, había tomado la decisión de desistir de mi cargo como líder del clan Ragnulf. Les había avisado con anticipación a la manada sobre mi renuncia para que comenzarán a buscar al siguiente infortunado.

Era de esperarse, todos, incluido los mismos ciudadanos se dieron cuenta de mi agotamiento y estrés, ya ni siquiera podía dormir en la misma habitación que Sergio y Oscar por mi aroma tan agrío, aunque no era necesario, no recuerdo la última vez que toque una cama. Afortunadamente conocería a mi reemplazo pronto, por lo que empecé a dejar mis actividades en esa manada de a poco para que él fuera introduciéndose a su nuevo puesto.

Había oído ciertos rumores de que la manada Ragnulf había obligado a Lando a adiestrar al futuro líder, lo cual tenía sentido dado que Lando era de las pocas personas en ese clan con amplio conocimiento sobre los deberes y el poder de un ingolf. 

Era asombroso el giro que había tomado la nueva vida de Lando, de tenerlo todo con solo pedirlo a suplicar que las sobras, era inevitable no sentir lástima por él luego de lo que le hice a su padre...

FLASHBACK

Después de haber recibido la noticia de que habían encontrado el cuerpo de Antonio, Steiner, Yuki y mi padre habían decidido ayudar con el entierro, mientras Checo y George se encargaban de los preparativos para el funeral de su madre, por lo que terminar con las exigencias de la diosa para romper la maldición iban a ser una tarea que debía realizar sólo.

-¡Atención todos! ¡Nuestro ingolf hablará! -Pierre gritó lo más alto que pudo frente a la manada Ragnulf-

Había dado instrucciones específicas de que quería la presencia de todo el clan para la ejecución de Zak Norris, no sólo porque así me lo había pedido la Luna, sino que tenía la intensión de ser piadoso y quitarle la enfermedad que había estado atormentando a Lando.

-Sé que no me ven como su líder y que no me quieren aquí -algunos asentían con la cabeza o murmuraban un sí- Pero no me iré sin antes romper la maldición que está afectando nuestro territorio, y dejar bien en claro un mensaje.

Miré cómo Otmar y Zak estaban siendo arrastrados con cadenas por otros lobos.

-Estos lobos cometieron los actos más despreciables que nuestra raza puede hacer, la traición y el asesinato a sangre fría hacia el ex omega líder Antonio Pérez del clan Accalia.