Too sweet | Hyunin

Capitulo ocho

Había sido una muy mala idea explorar el salón múltiple. Se dejó atraer por la música y había estado tan aburrido mientras Hyunjin estaba en medio de una videoconferencia que tuvo que salir de la cabaña por su propia cuenta.

Le había asegurado al alfa que no iría a la playa sin su compañía por lo que decidió explorar en los alrededores.

El clima era agradablemente cálido a pesar de que hoy el cielo estaba un poco nublado. El sol continuaba destellando acaloradamente contra su piel.

El interior del salón era elegante pero tradicional respetando la cultura de la isla. Por lo que la música era hawaiana y las decoraciones eran coloridas y muy florales. Le llamaba la atención. Y parecía que organizaban una de sus típicas fiestas.

Habían algunos turistas como el yendo y viniendo mientras bebían y disfrutaban del ambiente festivo.

Alguien que reconoció como el alfa que había conocido en su primer día aquí se acercó saludándolo alegre de verlo entrar. Jeongin se alejó un poco ante la cercanía del hombre pero correspondió su sonrisa con amabilidad.

—Es extraño verte solo. —murmuró el hombre. —O verte en los eventos que organiza el resort, en general.

—Oh. —sonrió incómodo. —Mi esposo y yo no somos muy sociales. —repitió aquello que ya habían dicho tantas veces para evitar estas situaciones incómodas.

—¿Y en dónde está el ahora? —preguntó muy interesado en su respuesta.

—Tenía un asunto del trabajo que resolver. —se encogió de hombros.

El hombre asintió extrañado. —Bueno, llegaste justo a tiempo para la música en vivo.

Jeongin sospeso la idea de simplemente negarse e irse. Pero no quería volver a la cabaña e interrumpir el trabajo de Hyunjin ni tampoco continuar siendo desagradable con el amable hombre que ya había sido rechazado tantas veces cuando intentaba iniciar una conversación.

Debió pasar cerca de una hora cuando la reunión del alfa terminó y con ello su preocupación por no saber nada de Jeongin lo golpeó instándolo a salir en su búsqueda.

Lo encontró fácilmente siendo atraído por su aroma como si de una polilla se tratase. Pero no pudo estar tranquilo cuando vio que estaba sentando en la misma mesa que otro hombre. Era un alfa. Y por lo que recordaba era el mismo que parecía no cansarse de buscar la atención del omega, ¿Por qué mierda estaban juntos? ¿Y por qué le enfadaba tanto?

Se acercó con pasos rápidos y zancadas largas. El primero en notarlo fue el alfa quien sonrió luciendo irritado por verlo. Jeongin siguió su mirada y reparó en él rápidamente. Regalándole una sonrisa dulce al verlo se levantó de su puesto ignorando la música y sin siquiera responder a la pregunta que el rubio alfa le había hecho antes de que Hyunjin llegara.

Hyunjin se preguntaba si es que acaso Jeongin no era realmente consciente de que aquel hombre le coqueteaba o porque lucía como si no estuviera haciendo nada malo. El omega le sacaría canas del estrés.

—¿Terminaste tu reunión? —preguntó al tenerlo a un lado. Hyunjin asintió y tomó al omega del mentón dándole un beso en los labios dejándolo anonadado. Jeongin lo miró confundido pero no dijo nada.

Suspiró dándole una mirada fastidiada al hombre que continuaba mirándolo sin molestarse en ser discreto. Estaba burbujeando de ira. Si se quedaba un minuto más podría desfigurar la estúpida cara del hombre.

—Tengo dolor de cabeza, acompáñame a la habitación. —dijo fingiendo una mueca de malestar. Jeongin se preocupó enseguida acercándose más y acariciando su mejilla como si quisiera quitar su dolor. Se sentía culpable de mentirle pero le agradaba la forma tan desinteresada en que se preocupaba por el.