Blanco, fue lo primero que vió antes de sobresaltarse e incorporarse.
Se palpó el cuerpo en busca de una herida, pero estaba ilesa, aún portaba el uniforme de su escuela pero no estaba en ningún lugar que ella conociera, todo el lugar era blanco, pero no era un hospital.
Empezó a caminar por el lugar, esperando encontrar una salida.
- Hola
Esta repentina voz la hizo pegar un grito y un brinco por el susto, luego miró a quien le había llamado.
Un tipo alto y robusto, portaba un traje blanco con una corbata celeste, su tez era blanca y su cabello era castaño igual que sus ojos, sus facciones eran suaves y sin duda, era atractivo.
- ¿Quién eres? -Preguntó ella desconfiada.
- Por ahora soy tu guía, ven, sígueme
Ella lo siguió hasta unas puertas de reja doradas, era enormes, parecían las clásicas rejas antes de entrar a una mansión.
- ¿Tu nombre, querida? -Preguntó una nueva voz.
Amma y el tipo se giraron hacia la voz y el tipo le sonrió.
- Hola, Pedro
«¿Pedro?, ¿Cómo San Pedro?» Pensó para sus adentros.
Amma miró con más atención al que llamaron 'Pedro', un tipo de mechones dorados y tez blanca, una bata blanca y unas hermosas alas blancas, no muy grandes.
«Si, estoy muerta, pero a este no le sientan sus imágenes de referencia»
- ¿Qué haces por aquí? -Preguntó Pedro al hombre que acompañaba a Amma.
- Está vez me toca guiar a esta
- Ha pasado mucho desde que guiaste a alguien -Dijo mirando al hombre con una sutil pizca de cautela, como si mencionarlo estuviera mal.
- Un poco -Respondió vagamente.
- Como sea, ¿Sus nombres, señorita? -Dijo volviéndose a Amma con una sonrisa.
- Amma...
- Aja, ¿Amma que?
- Amma Flores
- Oh, la pequeña de Naomi y Arturo...
Amma se heló ante estás palabras, hacia mucho que no escuchaba los nombres de sus padres de boca de otro, ella era una combinación exacta de ambos pero no eran muy conocidos en el pueblo donde ella vivía, por lo que pocas veces le tocó que la reconocieran como hija de sus padres.
- ... Si... -Respondió en un susurro.
- Bueno, puedes pasar
El tipo cuyo nombre no había dicho abrió las puertas con la fuerza de una pluma y luego la hizo pasar.
«¿Puedo decir ahora que técnicamente un hombre me llevó al cielo?»
- Suerte... Amma -Le susurró Pedro.
Amma quiso volverse y preguntar por qué había hecho eso, pero se abstuvo, sentía que algo no estaba bien.
El hombre y ella caminaron hasta una mansión a unos cuantos metros de distancia, ella había visto a más personas con alas, alas hermosas y blancas, ella estaba segura de haber caminado bastante pero no estaba cansada, no se sentía cansada, era inusual pero suponía el porque, al parecer las almas no se cansan, pero por lo que acababa de vivir determinó que aún podían sentir emociones.
Él la hizo pasar y la guío a una sala donde le indicó que se sentara, ella obedeció, había actuado muy tranquila por el momento pero estaba hecha un caos por dentro.
Él tomó asiento frente a ella y entonces Amma supo que era hora de soltar todas sus preguntas.
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La Esclava De Dios
FantasyDespués de una vida tormentosa, termina en las garras del mismo ser que le puso ese destino con el que hace un trato para salvar a la única persona que le importa, solo hay una condición. "Me perteneces completamente" Pero ella lo odia y no se queda...