Sedúceme Despacio

Capítulo 28

•••No lo niego, quiero besarle, hasta las heridas•••

Avery

No encuentro que más hacer, así que solo la abrazo hasta que se calme, cada vez que le pregunto a mi tía Margaret que sucede empieza a llorar, estoy asustada, nunca la había visto de esa manera y sinceramente no soy muy buena consolando.

—Lo siento, tuve una crisis, —dice alejándose de mí.

—¿Estas bien? —pregunto dudosa.

—Es Enrico.

—¿El está bien? ¿le paso algo?

Ella niega en silencio y agacha la cabeza, no pregunto más. Me estoy frustrando por la falda de información.

Algo paso entre ellos, tal vez discutieron y mi tía no me quiere decir y la entiendo es su decisión, busco helado de chocolate y vuelvo a su lado, enciendo la televisión y busco una película.

Mi tía entiende lo que hago y se acuesta en la cama con el helado, sonrió por lo adolescente que se ve, ¡vamos tiene treinta dos! pensé que en esa edad sería diferente los despechos.

Coloco la película de Crepúsculo, es una de sus favoritas, me acuesto a su lado relajándome.

Desde que llegue a la ciudad no habíamos pasado tiempo juntas, no de esta manera, nuestros horarios no cuadran, eran muy pocas las veces que teníamos tiempo en hablar o estar juntas.

Vimos toda la saga, yo estoy que me muero de sueño, son más de las dos de la madrugada, decido dormir con mi tía, apago la televisión y me acuesto.
Ya estaba casi dormida, cuando decide hablar.

—Enrico termino conmigo, —susurra.

Es más grave de lo que pensé, no solo fue una discusión, me parece decepcionante hacia una linda pareja, además que Enrico es un buen hombre.

—¿Por qué?

—Él dijo que no estaba enamorado de mí y que está saliendo con otra persona.

¡Auch!

Que maldito.

No pensé que Enrico fuera de esos hombres, nos mostró algo que no es ¿así serán sus hijos?

Cameron se nota que adora a Leah y es un buen chico, lo mismo Tyler, a pesar que lo conocí con una supuesta relación con Maya, me demostró que entre ellos no hay nada, Enrico tiene todas esas calidades que toda mujer amaría y le hizo eso a mí tía.

¿Así de fácil les resulta a ellos engañar?

¿Mostrar algo que no son?

«No Avery, no puede juzgarlo a todo por lo que hace su padre, eso no es justo» me digo, pero las dudas están ahí y no se minimiza.

—No puede ser, —niego tratando de entroncar una excusa.

—Una amiga me comento que lo había visto con una chica muy acaramelados, por supuesto que no le creí, lo llame le dije que si podía venir, dijo que estaba ocupado y fue ahí donde le pregunte sobre lo de la otra chica... no lo negó.

—¿Y por qué no te lo dijo antes?

—Según él estaba indeciso, les gustamos las dos y al parecer tomo su decisión.

—Ya va espera ¿estaba saliendo con las dos al mismo tiempo?

—Si. Estoy indignada.

¿Cómo fue capaz de jugar con los sentimientos de mi tía?

—Pero te presento a sus hijos, parecía que iba en serio contigo, eso quiere decir ¿que también le presento a sus hijos a la otra?

Estoy molesta.