Capítulo 34

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Avery

Los labios de Max son más gruesos que los de Tyler, se siente diferente, aunque no besa nada mal, la sensación es horrible.

Me obligo a profundizar el beso, Max me sigue un poco dudoso y a la vez con miedo, lo puedo sentir en su cuerpo rígido, él se siente igual de incomodo que yo.

El carraspeo de Tyler se escucha a mi espalda, Max se aleja al instante.

—¿Interrumpo?

Cierro los ojos y respiro ante de enfrentar a Tyler, las lágrimas golpean con fuerte queriendo salir, pero las reprimo, tengo que hacerlo, me giro, una ola de sentimiento viene a mí, dejándome sin palabras.
Tyler se ve fatal, su camisa se ve arrugada, el cabello desordenado, bajo de sus ojos ojeras pronunciadas, pero sus ojos son los que más me impacta, en ellos puedo ver su desprecio, decepción y rabia.

Me cuesta mucho sostenerle la mirada, esto es peor de lo que imagine.

—Tyler yo…
—¿Tu qué Avery? —Se aproxima a mí, su expresión muestra lo molesto que está.

Max me acerca a mí de manera protectora, Tyler capta el movimiento y se enoja aún más.

—Te lo íbamos a decir, pero no sabíamos cómo hacerlo, —interviene Max.

Eso sonó espantoso, sin embargo, le agradezco mentalmente, ni siquiera puedo hablar, Tyler ríe sin humor, es una risa de incredulidad, clava sus ojos en mi furiosamente y me preparo para sus palabras.

—¿Por qué? ¿Por qué me hiciste esto? —pregunta, me detiene antes de decir algo— No, no me lo digas, no vale la pena, pensé que eras diferente y eres la peor mujer que me he cruzado, quédate con ella Max, no quiero esta clase de persona en mi vida, —sisea entre dientes, se da la vuelta y se va sin mirar atrás.

Lo veo irse, me limpio las lágrimas que bajan por mis mejillas con lentitud, algunos estudiante miran de reojos hacia nosotros, intento taparme la cara con mi cabello, él tiene razón soy la peor persona, le hice mucho daño.

—¿Estas bien? —susurra Max.

—Sí, gracias por eso, te debo una, —sonrío sin ganas.

Mi piel se eriza, sintiendo la sensación de ser observada, miro hacia todos los lados, ya no hay nadie afuera todo entraron a su clases, sin embargo, aun siento alguien viéndonos.

—¿Avery? —Me sobresalto al escuchar la voz de Max— ¿Segura que estas bien? —insiste mirando a todos lados también—. Tu actitud me está asustado.

—Estoy bien, solo estaba buscando a Leah, aun no ha llegado. —Max me mira sin creerme, pero no insiste.

—Te estaba preguntado ¿Por qué hiciste eso?

—No quería estar más con Tyler, eso es todo. —Me excuso.

—Se lo hubiese dicho y ya, eso estuvo mal Avery.

Lo observo  furiosa, pensé que lo haría sin juzgarme.

—¿Sabes que Max? No tengo tiempo para un sermón, gracias por la ayuda, voy a clases.

Me voy entrando casi corriendo, por suerte aun no ha comenzado la clase, después de un minuto entra Leah agitada, se sienta a mi lado.

—¿Cómo estas nena? —pregunta mientras saca de su bolso su libreta.

—Bien ¿Y eso que vienes así? ¿Paso algo?

—Pasamos primero por el Hospital viendo a Beatrice.

—¿Qué le paso? —pregunto alarmada.

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