Sedúceme Despacio

Capítulo 9

••• Sí tú y yo queremos, tú y yo podemos •••

Avery

Podría ser un error haber invitado a Tyler quedarse, pero no quería que se fuera. Me acerco a Tyler cada vez que puedo, es una necesidad tan grande sentir su toque, aunque sea mínimo. Bueno tal vez este mas ebria de lo que quiero admitir

«Queridas hormonas contrólate»

Mis ojos se adaptan a la oscuridad, apenas lo puedo ver, puedo sentir su mirada mientras espera mi respuesta, ¿qué quiero saber de él? En realidad, quiero saber todo, hasta lo más pequeño ¿Cuál es su color favorito? ¿Qué comida le gusta? Estoy siendo muy cursi.

—¿Tienes novia? —apenas salen esas palabras de mi boca, quise darme un golpe.

Agradezco la oscuridad y que no pueda ver lo avergonzada que estoy ¿en serio? de tantas preguntas tenía que ser esa, bueno es una pregunta necesaria ¿no creen?

—¿Es importante para ti? —Se burla.

—Sí lo es, que tal si se entera que estas aquí y se ponga celosa, puede ser una loca.

—Tienes razón —ríe entre dientes—. Para tu tranquilidad no tengo novia.

—¿Por qué no? —cuestiono.

¿No es raro que un hombre tan guapo no tenga novia? ¿Tendrá algo mal? o sencillamente no ha encontrado la correcta.

—Porque no es lo que quiero en estos momentos. —Me decepciono al instante― Y tú ¿tienes novio?

—No, cupido me odia, —aseguro y río secamente.

—No creo que te odie, solo está buscando alguien que sea merecedor de ti —murmura.

—Que reconfortante. A este paso me haré vieja, cuidare gatitos junto a mi tía.

—¿Tu tía esta soltera? —pregunta sorprendido.

—Sí, no ha tenido suerte en el amor, creo que lo herede de ella.

—No digas estupideces. Eres muy hermosa, dulce, tienes un cuerpo para hacer vídeos porno y masturbarse toda la noche.

No puedo creer lo que está diciendo, río sonoramente.

—Eres un pervertido.

—Sí, creo habértelo dicho antes cariño. —Me gusta que me diga cariño, se escucha muy bien que incluso cierro los ojos y me permito disfrutar de cómo suena, es sencillamente maravilloso—. Es hora de dormir curiosa, sabes que mañana tenemos que ir a la universidad ¿cierto?

Se me había olvidado ese pequeño detalle para mi suerte no tengo ninguna evaluación.

—Si lo sé, gracias por recordarlo —Por alguna razón no tengo sueño. Todos mis instintos están activos y consiente del hombre que tengo al lado— Nunca he dormido con un hombre. —balbuceo, eso sonó horrible, decido aclarar— Siempre he sido yo, ningún hermano o prima, mis padres me criaron muy independiente, no necesite de ellos por las noches, mi mamá me decía que desde pequeña me gustaba dormir sola.

—Ahora me siento yo afortunado. Y si soy el primero hay que hacerlo bien ¿no?

—¿A qué... a qué te refieres? —balbuceo, nerviosa por el significado de sus palabras.

Se mete debajo de mi cobija, se mueve tan rápido que no entiendo lo que hace hasta que estoy prácticamente arriba de él, mi cabeza reposa en su pecho sintiendo sus latidos, mi mano por su cintura y nuestras piernas están cruzadas, pero aún se siente tanto espacio entre nosotros. Su mano empieza acariciar mi cabello enviando escalofríos a la vez una rica sensación de paz, su otro brazo lo pasa por mi cintura acercándome más a él.