SAUDADE (CHESTAPPEN)

III

— ¿Entonces me estás diciendo qué tu papá se enteró y quiere que te cases con Max? Está loco.

— Se enojó mucho — Se hizo bolita en su cama mientras mantenía el teléfono en voz alta— No quiero y no debo desobedecer pero tampoco quiero casarme con ese idiota.

— Puedo ayudarte a escapar, lo digo enserio.

— Jamás dejaría que te metas en problemas Char, ya veré cómo avanza la situación aunque no creo que mi padre quiera retractarse.

— Basta, lo detesto porque no es capaz de verte como su bebé que necesita cuidado y protección, te está lanzando a la boca del lobo.

Sergio suspiró porque sabía que su mejor amigo tenía razón.

— ¿Puedes venir a casa y traer comida chatarra? Por favorcito — Agudizó su voz para que él otro no pudiera negarse.

— Estaré ahí en cinco.

Mientras tanto en la mansión de los Verstappen un Christian furioso iba en encuentro de su hijo que apenas estaba cruzando la puerta cuando sintió un jalón de orejas.

— ¡Auch! Papá me duele — Se quejó mientras trataba de alejarse pero su padre no lo dejó.

— ¿Te duele? Que bueno Max Emilian Verstappen — Le dio un golpe en su espalda— ¿Cómo te atreviste?

— Así que papá Toto ya te contó — Pasó su mano por su pelo exasperado— Estaba ebrio así que pasó sin querer además Sergio es bastante promiscuo nada me garantiza que ese sea mi hijo.

Christian tuvo un deja Vu pues esas palabras también los escuchó de quién ahora era su querido marido a quien amaba demasiado.

— Max, siéntate porque debemos hablar. Esto es algo muy serio y necesito que empieces a ser responsable.

El rubio se sentó seguido de su padre quien lo miró y tomó aire antes de empezar a hablar.

— Se que en tus planes no estaba ser padre, lo tengo bastante claro pero no puedes huir de esa responsabilidad incluso si quieres excusarte no va a funcionar.

— No quiero casarme, no amo a Sergio papá entiende.

— No amas a nadie Maxie, lo siento que te lo diga pero no haz aprendido lo que es el amor de verdad, lo que es sentir devoción y miles de mariposas volar en tu estómago cuando ves a tu persona favorita, y quizás sea porque tú no te haz dado la oportunidad de intentarlo con quien realmente merece tu corazón.

Max no dijo nada solo se perdió en sus pensamientos, su padre Christian podía ser muy hábil a la hora de hablar y su poder de convencimiento era demasiado fuerte.

— No lo sé pero no quiero jugar a la familia feliz porque él es totalmente irritante, es lindo físicamente pero fuera de ello es un dolor de huevo.

— Entonces te gusta.

— ¡Papá! No intérpretes mis palabras a tu antojo además estoy con Kelly, no le he dicho nada y posiblemente quiera matarme.

Christian casi rueda los ojos porque esa muchachita no le caía nada bien, sabía que estaba con su hijo solo por los millones del cuál era heredero al ser hijo único.

— Lo siento por ella pero tendrá que aceptar que ya no es la única en tu vida y que quizás ya debería estar saliendo de ella.

— Estás de acuerdo con papá y ese estúpido matrimonio.

— Estoy de acuerdo en que debes ser un padre y esposo responsable, es mi última palabra Max y ve preparándote porque la boda será muy pronto.

El menor quería refutar y enojarse con su padre pero no podía, no cuando ese hombre lo cuidó como a nadie y lo seguía haciendo, todavía era el bebé de Christian pero cayó en cuenta de que en unos meses él tendría su propio bebé, mierda, eso le dio escalofríos.

☀️

Los preparativos para la boda iniciaron pero Sergio no quiso meterse, lo dejó en manos de su madre y del padre de Max, a quien por cierto no veía desde el incidente pero tampoco quería hacerlo porque podría romperle la cara de un golpe.

Pasaba sus días estudiante y tratando de no vomitar cada vez que comía algo porque hasta lo más insignificante le hacía daño.

Charles iba a verlo seguido pues el ojiverde se preocupaba muchísimo por el estado de Checo.

— Chequito siempre imaginé que mutuamente asistiríamos a nuestras bodas, que sería un día inolvidable pero ciertamente las cosas no salen como uno imagina.

— Lo siento — Susurró.

— No te disculpes, no lo decía en forma de reproche sino que me gustaría que hubiera sido distinto — Se inclinó sobre el abdomen todavía plano de su mejor amigo.

— Esa cosa me está matando — Se quejó.

— No le digas así, puede escucharte — Soltó una risita— Se que no es la mejor situación pero amaré mucho a mi sobrino o sobrina.

— Supongo que es alguien afortunado de tener un tío que lo va a mimar mucho porque dudo que su padre lo quiera aunque yo tampoco le agarro cariño.

— Es normal, no fue concebido por voluntad pero veamos algo de positivo en esto aunque Max me caiga de la patada no creo que sea tan patán ¿Verdad?

— No sabría que decirte — Era el más patán del mundo.

— Si te hace algo lo mataré con mis propias manos, lo juro, romperé esa cara de sexy tonto que tiene.

— ¿Considerás a Max sexy? — Rodó los ojos.

— ¿Tú no? — Se burló.

— Jamás de los jamases así que ya olvídate de él.

— Solo bromeaba — Soltó una risita traviesa.

Los días pasaron más rápido de lo que Sergio hubiera querido porque cuando menos lo esperó estaba a un día de su boda con Verstappen.

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Que checo bote a Max y me diga dónde 💋