VI

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Al día siguiente Sergio no quería levantarse de su cama, se sentía muy desganado aparte de que estuvo vomitando y haciendo pis toda la noche, se sentía agotado física y mentalmente.

Tocaron su puerta, se quiso hacer el dormido pero no funcionó porque siguieron tocando hasta que se levantó a abrir y era Lando quien abrió bastante sus ojos al verlo.

— Joven Sergio — No sabía si preguntar o no pero al final lo hizo— ¿Por qué tienes moretones en los brazos?

— ¿Qué? — se miró y era cierto— Supongo que es parte del embarazo — Le restó importancia.

— Debería visitar al ginecólogo porque no es normal — Lo observó — Quiere que le traiga su desayuno o irá al comedor por él.

— Dame cinco minutos y estaré en la mesa.

Caminó hasta el espejo para observar mejor los moretones en sus brazos, se veían muy mal y eso lo hizo sentirse peor ¿De cuando acá tenía que soportar que alguien le hiciera daño?

Después de asearse fue por su desayuno, para su mala suerte Max estaba ahí pero no le dijo ninguna palabra solo se sentó a comer.

El silencio era incómodo, por varias razones pero el principal era por la pelea de anoche además de que Max ya se había dado cuenta de lo que había provocado.

— No estaré en casa todo el día, regresaré tarde— Avisó.

— Por mi no vuelvas — Siguió comiendo.

— Solo te estaba avisando.

— No es necesario — Suspiró — No eres nada mío además las "putitas" no merecemos nada ¿Verdad? Nisiquiera que nos avisen si volverán a casa o no.

— Sergio, lo siento por lo de anoche — Suponía que si se había sobrepasado.

— No quiero tus disculpas, eso no va a desaparecer lo mierda que me siento y tampoco va a sanar de inmediato lo que provocaste físicamente. Si regresas o no a casa es tu problema.

— Bien.

— ¿Bien? Que gracioso — Dejó de comer y se retiró.

Esperó que Max se vaya para arreglarse un poco y salir, quería respirar un poco de aire fresco porque sentía que se estaba ahogando dentro de esa casa.

Fue al centro comercial, quizás hacer algo de lo que hacía antes podía mejorar su ánimo, minutos después se encontró con Lewis quién lo saludó con un fuerte abrazo que lo hizo deshacerse.

Después de lo que Max le contó Carlos no sabía si golpearlo o respirar profundo para no cometer alguna locura.

— Que carajos te pasa, está bien que no lo quieras pero tocarlo físicamente es demasiado.

— Lo sé y ya me disculpé.

— Las disculpas no reparan nada, ya deberías saberlo.

— ¿Entonces qué hago?

— No sé, quizás empieza por terminar con Kelly, después aceptar tu paternidad y finalmente comportarte como un esposo decente porque ahora no eres más que mierda envuelta.

— Como voy a terminar con MI novia, eres estúpido o te haces.

— No Max, ya ni deberías pensar en seguir con esa relación porque tú tienes esposo y un bebé en camino, deberías estar cuidándolo. No se trata de si sientes algo romántico o no por él pero tu responsabilidad como padre debería prevalecer.

— Como sea, vamos a buscar algo en el centro comercial que está cerca de mi casa. Le regalaré algo porque es bien materialista.

— Supongo que la intención cuenta.

Fueron al dichoso centro comercial, el rubio no sabía que podría gustarle a Sergio después de todo no sabía casi nada de su esposo.

Estuvieron cerca de treinta minutos de tienda en tienda cuando pasaron por una donde había ropa de bebés así que ingresaron pero por cosas del destino se encontraron con una escena que hizo arder en cólera a Max.

Ahí estaban Lewis y Sergio viendo ropa de bebé, el más bajito estaba sonriente algo que molestó demasiado a Max.

— No intentes hacer nada estúpido.

— No me digas que hacer Carlos porque ahora mismo estoy a nada de perder el poco control que tengo.

Y así fue, Sergio solo sintió un tirón de brazos y luego se vio prácticamente arrastrado al auto de Max, este cerró la puerta bruscamente y manejó a una velocidad que hacía que el menor quisiera vomitar hasta lo que no.

Cuando llegaron a casa la discusión empezó una vez más.

— ¿Qué mierda hacías con él?

— Algo que no puedo hacer contigo — Se sentía furioso y triste.

Se había dado cuenta lo lindo que se sentía ir a buscar cositas para el bebé pero eso no podía pedirle a Max porque él no quería a ninguno de los dos.

— Así que andabas jugando a la familia feliz, eres tan libre de irte con el padre de tu bastardo.

— Cuanto daría yo para que Lewis fuera el padre de mi bebé y no tú — Se le hizo un nudo en la garganta.

— Lo único que te detiene es que él no tiene la fortuna que yo tengo ¿Verdad? Puta ambiciosa.

— Estoy harto de escuchar esa palabra Max, estoy harto de tener que soportar tu mierda porque no he hecho nada a propósito para complicar tu vida. Jamás hubiera cambiado mi vida de antes por esto porque dinero es lo que nunca va a faltarme, tu maldito dinero no me interesa enserio, así que cierra la boca y deja de decir cosas sin sentido.

Sin más se fue a encerrar en su habitación a llorar, jamás había llorado tantos días seguidos porque antes era difícil que una lágrima saliera de sus ojos pero ahora sentía que podría formar un lago con ellas.

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Lewis se enteró que Sergio está esperando un bebé y dijo: ¡voy a ser tío!

Aviso que cuando estoy de vacaciones no chambeo los domingos así que vuelvo el lunes con actualizaciones de ambos fics 💨✨

Pueden dejarme recomendaciones de lo que les gustaría que pasara 🥴

Por cierto hoy hubo conducción irrespetuosa por parte del creador del sin respeto 💋

SAUDADE (CHESTAPPEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora