Al entrar al departamento, sentía como si el peso del mundo estuviera sobre mis hombros. El beso de Joon me había dejado más que furiosa, y no sabía cómo manejar la situación sin involucrar a Jungkook. Caminé hacia la habitación, intentando calmarme, pero mi mente estaba llena de preguntas y miedos.
Jungkook me esperaba en la cama, con la expresión tranquila que siempre lograba que todo pareciera estar bien. Pero esta vez, algo en sus ojos me decía que había notado mi tensión.
—¿Todo bien? —preguntó con voz suave.
—Sí, solo estaba... sacando la basura —respondí, intentando sonar casual mientras me sentaba en la cama junto a él.
—Eunji, te conozco lo suficiente como para saber que algo te está molestando —insistió, mirándome fijamente.
—No es nada, de verdad —dije, evitando su mirada.
Jungkook suspiró y tomó mi mano entre las suyas.
—Por favor, no me mientas. Si algo está mal, quiero ayudarte —su tono era sincero, lleno de preocupación.
—Es solo que... —empecé a decir, pero me detuve, sin saber cómo continuar.
—¿Es por Joon? —preguntó de repente, cortando mi silencio.
Mis ojos se abrieron con sorpresa, y finalmente lo miré.
—¿Cómo lo sabes?
—He notado cómo cambias cada vez que lo menciono o cuando recibes una llamada de él. Y después de lo que escuché en la cocina, sé que algo pasó —explicó Jungkook.
Bajé la mirada, sabiendo que no podía seguir ocultándolo. Tomé aire profundamente y decidí que era momento de ser honesta.
—Joon apareció aquí anoche. Me siguió cuando salí a sacar la basura. Estaba furioso y me dijo que me alejara de ti... —mis palabras se atoraron en mi garganta mientras recordaba el encuentro—. Me acorraló y... me besó a la fuerza antes de irse.
Los ojos de Jungkook se oscurecieron al escuchar esto, sus manos se apretaron alrededor de las mías.
—¿Te hizo daño? —preguntó con un tono que no había escuchado antes, mezcla de preocupación y rabia.
—No, no me hizo daño físico, pero... no quiero que estés involucrado en esto —dije, mirando el vendaje que cubría su herida—. Joon ya te atacó una vez, no quiero que vuelva a pasar.
Jungkook se levantó de la cama, visiblemente molesto.
—Eunji, no puedo quedarme sin hacer nada mientras ese idiota te amenaza y me ataca. No puedo permitirlo —su voz era firme.
—Pero no quiero que te arriesgues de nuevo. Ya suficiente con lo que pasó... —dije, poniéndome de pie para acercarme a él.
—Esto no se trata solo de mí. Se trata de ti también. Él no tiene derecho a tratarte así, y menos después de todo lo que ha hecho —dijo, tocando mi mejilla con suavidad—. No quiero que tengas que soportar esto sola.
—Pero Jungkook, no quiero que nada de esto te lastime más de lo que ya lo ha hecho —respondí, con lágrimas comenzando a formarse en mis ojos.
—Eunji, me lastima más verte sufrir y no poder hacer nada al respecto —dijo con tristeza—. No puedo quedarme de brazos cruzados.
Nos quedamos en silencio un momento, ambos intentando procesar lo que acabábamos de decir. Finalmente, rompí el silencio.
—¿Qué vamos a hacer? —pregunté, sintiéndome perdida.
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Karma
RomanceEunji está atrapada en una relación tóxica con Lee Hyeon, un novio encantador que no puede dejar de coquetear con otras chicas. A pesar de las constantes mentiras y decepciones, Eunji lucha por dejarlo debido a su amor y la aprobación de su familia...