𝐌𝐚𝐭𝐫𝐢𝐦𝐨𝐧𝐢𝐨 𝐀𝐫𝐫𝐞𝐠𝐥𝐚𝐝𝐨 (Mattheo Riddle)

Capítulo 60

Al salir de la mansión Riddle, de inmediato me dirigí a casa. Al llegar, encontré a Pansy con su madre y otra mujer que al parecer era una diseñadora de vestidos.

Pansy:Amor, ¿dónde estuviste?

Mattheo:Tenemos que hablar ahora.

Pansy:Está bien, cariño.

Caminé hacia el despacho con Pansy tras de mí. Al llegar, cerré la puerta de un fuerte portazo.

Pansy:Y bien, ¿qué sucede, amor?

Mattheo:Deja ya de actuar, como que nos casamos en tres semanas.

Pansy:Oh, ya te enteraste. Pues si en tres semanas más nos casamos, el embarazo se empieza a notar y no quiero verme gorda el día de mi boda

Mattheo:Por Merlín, olvida todo esto. Entiéndelo ya, NO TE AMO y jamás lo haré.

Pansy:Sé que lo harás, así como con t/n, tampoco la amabas y con el tiempo... (No pudo terminar de hablar porque la interrumpí).

Mattheo:Jamás dejaré de amar a t/n, así que deja de compararte con ella.

Pansy:Pero ella a ti no te ama y jamás lo hizo. Te engañó con tu propio hermano y se embarazó de él. Deja ya de ser tan imbécil.

Mattheo:¡Cállate! -le grité molesto.

Pansy:Eres tan patético. Lo tienes todo conmigo: tienes mi amor, te voy a dar un hijo que sí lleva tu sangre, y sin embargo sigues cegado por esa zorra.

Mattheo:No vuelvas a hablar de ella de esa manera. Y no, no estoy cegado por ella, estoy enamorado de t/n y eso es algo que ni tú, ni nadie podrá cambiar.

Pansy:¡Eres un estúpido! ¡No ves que estoy intentando darte todo lo que quieres! ¡Un hijo, una familia, una vida juntos! -gritó molesta.

Mattheo:¡No quiero nada de eso contigo! ¡No te amo y no voy a casarme contigo!-le grite molesto

Pansy:Qué lástima me da escuchar eso, cariño. Pero te guste o no, vamos a casarnos.

Ni siquiera me molesté en responderle nada. Solo salí de aquel despacho dejándola completamente a solas.

T/n Pov:

Aún seguía en San Mungo. El doctor me había indicado que pronto podría regresar a casa. Mi madre aún no regresaba, y yo aún seguía con Draco y con mis hijos hasta que apareció una enfermera que venía por Evangelin y Rigel, pues al parecer iban a hacerles algunos chequeos para asegurarse de que todo estuviera bien con ellos. En cuanto mi hermano y yo nos quedamos a solas, ambos estábamos en silencio hasta que fue él quien decidió hablar.

Draco:¿Te sucede algo?, digo, tus hijos acaban de nacer y sé que fue un parto difícil, pero al final de cuentas, todo valió la pena, ¿no?

T/n:Sí, claro que estoy bastante feliz, pero hay algo que no puedo sacarme de la cabeza.

Draco:¿Quieres contarme?

Dudé durante varios segundos si responderle o no, pues no sabía si debería contarle sobre esa horrible pesadilla, pero finalmente decidí que no, no iba a contarle eso, pues no quería hacerlo sentir mal.

T/n:No es nada... solo olvídalo.

Draco:Pero...

T/n:De verdad es algo sin importancia. ¿Dónde está Scorpius?

Draco:Le pedí a Daphne y Theo que lo cuidaran.

T/n:¿Crees que Mattheo regrese?

Draco:No lo sé. ¿Quieres que lo llame?