Un poco más de ellos, y sí van poco a poco, lento lento...digamos que es lo que se llamaría slow burn romance...aunque no del todo
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Los días siguientes el ministro Fei no almorzó en la casa y llegaba demasiado tarde en la noche, ella sabía que estaba trabajando, pero Yichen extrañaba su presencia. Se había acostumbrado rápido a tenerlo en sus vidas.
-¿Tampoco hoy comerá aquí ni jugará weiqi conmigo? – preguntó pero era casi más una queja.
-Está muy ocupado con el trabajo, tienes que tener paciencia- le explicó ella y pensó que sería mucho más fácil si su padre no guardara silencio , estaba segura que él sabía con exactitud la situación del Príncipe Heredero, sin embargo dejaba que corrieran los rumores y la incertidumbre, dejaba que cada quien moviera fichas en un juego que él dominaba. Y Longxuan también estaba atrapado en ese juego, quedaba decidir si el rey apreciaría su trabajo o si se le volvería en contra.
Aquella noche también había llegado demasiado tarde, no había cenado y se había encerrado en su estudio. Liyuen estaba ansiosa, quería saber si había alguna noticia, así que fue a verlo, golpeó pero él no respondió, entró con cautela y se lo encontró dormido sobre el escritorio. Pensó en despertarlo, o buscar a unos sirvientes para que lo llevaran hasta la cama, pero optó por buscar una manta y cubrirlo. Luego se retiró tan silenciosamente como había llegado.
Muy temprano en la mañana, Longxuan la mandó a llamar. Llevaba el cabello mojado y ropa limpia, pero se lo veía cansado.
-Siéntese – la invitó al verla entrar.
-¿Alguna noticia? – preguntó ella y no pudo evitar sentir temor.
-No sé nada de su hermano aún, mis hombres no han regresado, es un viaje largo. Y acá las noticias siguen siendo confusas, aunque creo que eso es bueno, si estuviera muerto, lo sabríamos – le dijo y extrañamente la tranquilizó- Sin embargo, sí hay otras cuestiones preocupantes. ¿recuerda lo que me dijo sobre la esposa del viceministro de Guerra?- preguntó y ella asintió- Bueno, creo que ya sé la conexión, es el encargado de las provisiones a los ejércitos y sospecho que el Príncipe Heredero no ha estado recibiendo lo que le corresponde, lo que debe haber dificultado su campaña.
-¿La consorte Shuan está detrás de ello?
-Eso supongo, pero no tenemos pruebas, de hecho solo hay números que no coinciden, pero necesitamos que su hermano nos proporciones información para cotejar y estar seguros. Cualquier acusación sin pruebas, sería un peligro.
-¿Entonces solo podemos seguir esperando?
-No, también hay mucha otra información sobre diferentes funcionarios, transacciones, favores, y sus vínculos. No se trata solo de esperar sino de usar ese tiempo para investigar y estar preparados para cuando llegue el momento, estar informados siempre nos deja un paso por delante. Creo que no puedo ser tan concreto como esperaba, solo que pensé que la tranquilizaría saber que nuestra visita al evento de las Flores rindió sus frutos.
-Gracias. Y debería descansar más. Si se sobre esfuerza y enferma, tanto trabajo no tendrá sentido.
-¿Se preocupa por mí? – preguntó Longxuan sin poder evitarlo.
-Sí, claro... somos aliados- dijo ella bajando la mirada.
-No debería preocuparse. Estoy acostumbrado a trabajar mucho y quería aprovechar la ventaja que teníamos antes que se dieran cuenta. Descansaré más de ahora en adelante- afirmó y cuando ella se marchó, desvió su mirada hacia la mata que estaba doblada en una silla.
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La Grulla y la Luna
RomansaLa Princesa viuda Liyuen necesita protegerse a ella y su hijo de las intrigas del Palacio, por ello toma la decisión de proponerle una alianza a través del matrimonio a un hombre poderoso pero que la desprecia, el Ministro Fei Longxuan.