⏳👥​| Invierno eterno

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-¡ASESINEN A TODOS LOS TRAIDORES, NO DEJEN QUE NINGUNO PERSISTA ANTE NUESTRA SAGRADA FE! -Gritaba una voz femenina, desde las afueras del restaurante en ruinas.

Sonidos de disparos empezaron a escucharse desde la distancia, las balas golpeando contra las ventanas y paredes dejando un rastro de pólvora y humo... Thomas estaba escondido debajo de una de las mesas del restaurante aferrando por su vida, cuando miró a su costado vio el cuerpo de uno de sus compañeros fusilado.
-¡JEFF! -Gritó la rata con temor.

Pero Jeff yacía inerte en el suelo.

El tiroteo cesó por un momento, Thomas aprovechó para salir debajo de la mesa y agarrar el revolver que tenía su compañero en la mano derecha...
Revisó cuantas balas le quedaban... Solo 2.
Rápidamente se agachó al escuchar como una bala impactaba cerca de el, lo habían visto.
-AHÍ ESTÁ EL TRAIDOR, DISPAREN! -Exclamó la misma voz femenina mientras empezaba el tiroteo de nuevo.

Thomas tenia que gatear para llegar a la salida trasera del restaurante, por lo que empezó a hacerlo con rapidez... En el proceso cortándose por los pedazos de vidrio que había en el suelo.
-¡TE HAREMOS SUFRIR POR EL DOLOR QUE LE OCASIONASTE A NUESTRA MADRE, RATA! -Decía una hipopótamo mientras entraba al restaurante por la puerta principal pegando una patada.

La hipopótamo tenia un lanzallamas en sus manos, apenas vio a Thomas prendió la flama que fue rápidamente dirigida hacia el, pero pudo esquivarlo.
Thomas se levantó rápidamente y empezó a correr hacia la salida, pero estaba bloqueada, el lugar se estaba convirtiendo en un infierno... Cuando vio que su ex-compañera se acercaba a el, sacó la revolver de su cinturón y disparó, atravesando la frente de su ahora enemiga.

La rata no perdió el tiempo y empezó a forzar la puerta a empujones, en el proceso iba escuchando como los compañeros de la hipopótamo trataban de entrar al lugar sin quemarse, pues eso se estaba haciendo algo complicado debido al humo y a las llamas ardientes.
Para la suerte de Thomas, pudo abrir la puerta pero el cayó al piso, sintió la suave nieve en sus manos heridas, se levantó y corrió lejos, muy lejos.
-¡SE ESCAPÁ, DISPAREN! -Gritó una voz masculina.
-No, ya está... Es muy tarde, tenemos que volver con nuestra sagrada madre... -Respondió su compañero al ver la situación.

Después de unos minutos de correr por el pueblo desolado por la destrucción y masacre del lugar, Thomas llegó a una casa en estado deplorable... Al entrar, el lugar se veía decente, pues había calefacción y algo de luz, este hogar era habitado por los sobrevivientes del pueblo, por aquellos que tenían aun algo de moralidad.
-¡THOMAS! -Gritó con preocupación una Koala algo vieja.
-No puede ser hombre... ¡¿Estas bien?! -Sumó un Elefante un poco mas viejo que la rata.

Thomas
-Estoy bien... Mentira, que digo...
-No estoy bien, mataron a Jeff enfrenté mio y tuve que matar a uno de esos hijos de puta...

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-¡CARAJO! -Exclamó el Elefante mientras pateaba la silla del lugar.

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-Ay querido... Vení que te limpió esas heridas, tus manos deben estar congeladas! -Dijo la Koala.

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-Elizabeth, no tenemos mas vendajes, los últimos los usó Melina! -Respondió el Elefante.

Elizabeth
-Walter... Puedo usar los retales de tela de la ropa que no usamos, no creo que quieran usar ropa de bebe, no es así?

Walter
-Viejita inteligente...
-Thomas... Siéntate en el sillón, tenes que descansar.

Thomas hizo caso a Walter y se sentó en el sillón, posando sus manos cerca de la chimenea reconfortante, esperó a que Elizabeth y Walter terminen de romper la ropa de bebe...
-Tenemos que escapar de este infierno... -Dijo Thomas.

Walter
-Ya quisiéramos, es imposible a no ser que quieras morir. -Dijo mientras rompía los últimos trozos de ropa.

Elizabeth
-Yo me tengo que quedar acá, ya estoy vieja para correr, mi cuerpo ya no es como antes... -Respondió mientras se acercaba a Thomas y le empezaba a vendar las manos.

Walter
-No voy a dejarte acá, ya perdí a Jeff... No los quiero perder a ustedes.

Elizabeth
-Mi destino es inevitable Walty... -Respondió mientras se levantaba del suelo para discutir y reconfortar a Walter.

Walter
-¡C-callate! No digas eso... -Respondió con la voz quebrada.

Walter y Elizabeth se conocían hace demasiado, pues ella era la niñera de Walter cuando el era un niño... Thomas escuchaba la conversación y solo pensaba en como llegó a este momento, que tan mal lo hizo en la vida para merecerse esto?
De su campera polar sacó una foto de el y su hijo... Se quedo viendo la foto por unos momentos pensando en como perdió a su bebe, de la peor manera posible.
-Lo siento... Todo esto me lo merezco. -Murmuró mientras guardaba la foto en su campera.

Sus ganas de volver a recuperar su vida y la de sus compañeros revivió, la rata sintió una determinación inquebrantable, por lo que agarró el revolver y se levantó del suelo.

Walter y Elizabeth seguían discutiendo, la conversación de ellos cesó cuando vieron a Thomas alzar el arma y recargar unas 2 balas mas... Sumando un total de 3 balas en el clip.
-Nos iremos de este puto lugar, y no permitiré que nada nos pasé.






Un lío de emociones. (Foxy x Doggy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora