"El camino de un héroe no es fácil, así que pueden rogar salir vivos de ahí"
Durante una dura batalla contra su enemigo, Izuku termina siendo transportado a un mundo totalmente desconocido para él en donde conoce a la Diosa Hestia, quien será su com...
—Parece que está realmente confiado... Al menos en sus capacidades —el aventurero caminaba en dirección a su enemigo— Aún puedo oler dudas en tí, Midoriya...
— Él solo fijó su mirada en el enemigo que caminaba hacia su posición. Izuku llegó a pensar que ese chico estaba usando algún tipo de trampa, o algo así, debido a sus repentinos aumentos de poder... Era algo estúpido pensar algo así, tenía en mente —
—¿Quién es este tipo...?—se preguntaba, cruzando los brazos y poniendo pose pensativa—
— Allen Fromel; una vez más listo para combatir en contra de sus oponentes. Un aura brillante envolvió al aventurero, y pocos segundos después volvía a un estado físico perfecto. Con capa roja, armadura y una lanza hermosa para empuñar —
— Mhjm —serio—
— En la lejanía, el aventurero gritaba algo casi inaudible, mientras en guardia se ponía —
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— ¡Hnh-!
¡BOOM!
— Izuku detenía con gran fuerza el poderoso filo del arma de Allen, generando una destrucción increíble a sus espaldas, consecuente de la contra-fuerza de sus pies... Había sido lanzada con una fuerza insuperable. Y aún sostenía el arma en su puño cerrado, justo en la parte más afilada de tal. Poca sangre salía de una herida —
—One for All—dió una vuelta en su propio eje—¡Fa-Jin; 100%! ¡¡HMP!!
— ¡Y "Ka-Bom"! La lanza volvió a su portador, aunque de forma violenta y rompiendo todo el brazo izquierdo del chico. Suspiró —
— ...
— ...
— Cruzaron miradas segundos antes de que salieran impulsados en contra, empezando así una poderosa batalla entre "Don" y "Magia". Golpes por todos los lados del cuerpo de Allen e Izuku, pero ninguno hacía más allá de lo "normal"; esto debido a la regeneración que tenían. Sin embargo, la del peli-verde seguís superando a la de su contrincante por ciertas ventajas que tenía. Tanto en velocidad como en efectividad en medio de la pelea. Al tener que activar la suya en medio de los largos intercambios de ataque, el castaño recibía por consecuente una ráfaga (mínimo) de golpes tanto en la cara como costillas —
— ¿¡Aún no te has dado cuenta, chico!? ¡¡Vamos, eres mayor que yo; abre los ojos!! —parando un golpe de lanza con uno de puño— ¡¡A Freya no le importan sus hijos!!
— ¡¡Aahg!! —enterró el filo de su lanza en la muñeca del enemigo, arrugando el ceño en una enojada expresión—
— ¡¡Solo los ve como marionetas a las cuales sacar ventaja!! ¡¡Vamos, dime que Ottar no se ha dado cuenta!! —insistía resistiendo el filo apenas unos cinco centímetros de profundidad en su muñeca—
