—¿Qué sucede? ¿Por qué me trajiste tan temprano a casa?—pregunté
—¡Perdón! Es que tu padre quiere verte justo en este instante. Se veía muy enfadado—dijo Francisco al volante.
—El máximo nivel al que ha llegado fue cuando saque una nota desaprobatoria, y solo me obligó a estudiar dos horas más—dije.
—Pues esto es más serio ____, dedujo totalmente todo, que te escapaste para ir con Sebastián y que tuvieron una noche...romántica.
—¿Cómo lo descubrió?
—Tu madre encontró el vestido rojo en tu armario cuando iba a lavar la ropa, y al mostrárselo a tu padre... comenzó a decir lo que pensaba en voz alta. Así que me pidió que te recogiera a la escuela en su nombre para que te lleve a casa a hablar con él.
—¿Ahora que le diré?
—Descuida, yo te ayudaré.
—Te agradezco...aunque tú no estuviste del todo involucrado, yo soy la culpable de este caos.
—Hay que verle el lado bueno, al menos tuviste una noche mágica—sonrió a medias.
—Sin embargo, ahora debo enfrentarme a una tarde llena de gritos. Mi papá es persistente y testarudo, es difícil cambiar su opinión. Ninguna palabra podría defenderme.
—Dile lo que piensas, jamás podrán entenderse si no tienen en cuenta las opiniones del otro. Tu padre es humano, posee sentimientos, así que hay una razón que le impide aceptar que amas a otro chico que no soy yo.
—Eso es lo que trato de entender ¿Por qué quiso...ligarme a ti?—lo miré
—Lo averiguarás pronto—dijo viéndome.
Bastaron unas cuantas calles más para llegar a nuestro destino. Con forme subía los escalones, intentaba reunir suficiente valor como para enfrentar los próximos regaños de mi padre. Él tiene que aceptar que ya estoy en una edad en la que puedo valerme por mi misma, o al menos ser lo suficientemente madura como para saber manejar mi vida; y que además, la persona que eligió mi corazón es Sebastián. No puede simplemente entregarme a un chico cualquiera y esperar a que de la nada nazca el amor, así tal vez funcionaban los matrimonios antiguos; no obstante, ahora ni nosotros mismos elegimos a esa persona. Es espontaneo, impredecible, y solo tú te das cuenta de lo que sientes. Mi padre aún vive en el pasado, creyendo que sería mejor si aun dependo de sus decisiones.
Era hora de cambiarlo.
Cuando Francisco y yo nos situamos frente a la puerta, tomé las llaves de mi mochila para abrir el departamento, y al hacerlo...los vi. Mi madre estaba tomándole la mano a su esposo, mientras que este se encontraba con la cabeza gacha murmurando ciertos comentarios acerca de mí; al girar hacia la entrada para observarme, los dos nos miraron un par de segundos hasta que mi padre habló.
—____...sabes que no quiero gritarte, ni tu tampoco lo deseas, así que seremos los más pacíficos posibles ¿De acuerdo?— dijo respirando profundamente.
—Esta...bien...—dije confundida.
—Siéntate cariño— dijo mi madre señalando el sofá frente al que ella se hallaba. Francisco se quedó parado a un costado del sillón en donde me senté.
—Ayer tu madre y yo estábamos muy preocupados por ti—empezó.
—Eso lo sé—respondí.
—Y ella...encontró un vestido rojo...uno muy bonito— dijo respirando más profundo.
—Sí...
—Y al verlo...recordé que ibas a ver a un..."youtuber"... ¿No es cierto?
—Sí, es verdad...
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Corazones Encontrados | Sebastián Villalobos y tú |
Fanfic¿Sabes lo que es encontrar a tu otra mitad? ¿A esa media naranja? ¿A esa persona? Pues estos dos adolescentes no lo saben. Pero están tratando de hacerlo. ____ ____ una chica de 16 años de ____ (tupais). A pesar de la mala suerte que tiene en el amo...