Auras

21

Regulus miraba aquella fotografía con una sonrisa, su pequeña se veía deslumbrante y estaba orgulloso de solo verla, aunque siempre estaba orgulloso de él.

—A este ritmo ella podrá sentir tu mirada, Reggie

El comentario de Rabastan hizo que él se sobresaltara, no lo había escuchado llegar y casi deja caer la fotografía por la sorpresa.

—Mi solecito se ve hermosa

—Eres todo un padre orgulloso —Regulus sintió sus mejillas calentarse

—No puedo evitarlo

—Lo sé, te ves tierno así —Regulus le dio un casto beso en los labios en respuesta.

En Hogwarts las cosas estaban extrañas, nadie había visto a la rubia y eso no era algo normal, su ausencia se notaba demasiado y tenía a todos preocupados, como si eso fuera poco, ese día era la segunda prueba, Cedric no se sentía capaz de concentrarse en la prueba mientras su amiga estaba desaparecida.

La hora de la prueba llegó, los cuatro campeones estaban en fila y en cuanto se dio la indicación todos cayeron al lago. Nadaron en las profundidades del lago negro, enfrentándose a diversas criaturas, siguieron adentrándose en la oscuridad llegando a una zona donde había varias sirenas, allí se encuentran con 4 personas retenidas. Cedric inspeccionó con la mirada a las personas. Ahí estaba.

Vela tenía los ojos cerrados, sus cabellos dorados flotaban en el agua. Nadó hasta donde ella, la liberó de aquel lugar y se apresuró en llegar a la superficie, ese lugar estaba muy helado y no quería que su amiga se enfermara. Alcanzó a ver como los otros campeones llegaban al lugar, pero esa era la menor de sus preocupaciones.

Al llegar a la superficie, Vela dio una gran bocanada de aire mientras se aferra al cuerpo de Cedric, temblando de frío.

—Tranquila, te tengo, te tengo

Ambos llegaron a la plataforma, los aplausos se hacen presentes, ayudaron a ambos a subir y les pasaron toallas.

—Hace mucho frío —Susan y Hannah intentaron ayudarla a hacerla entrar en calor mientras Cedric le ponía también su toalla encima junto a una bata —. ¿Ganamos?

—Ced está en primer lugar —informó Susan

El resto de campeones llegó junto a los estudiantes rescatados, Dumbledore informó el orden en el que quedaron los campeones.

Vela solo quería llegar a su habitación para cambiarse de ropa, la sensación de la ropa mojada pegada a su cuerpo le era desagradable, haciendo que se sintiera muy incómoda

—Vamos, Vela, debes cambiarte, tu igual, Cedric, después nos podemos reunir para tomar un café, ambos lo necesitan —dijo Hannah.

La rubia asintió y aceleró el paso para poder llegar con mayor rapidez a su destino.

Se dio una ducha caliente y se cambió de ropa, encontrándose con Cedric en la sala común. Ambos agradecían que ese lugar fuera lo suficientemente cálido.

—¿Vamos por algo de beber?

—Sí, me vendría bien con chocolate caliente —respondió ella.

Todo el grupo de amigos rodeaba a los recién cambiados, preguntando una y otra vez si se sentían bien o si tenían frío, si les apetecía algo caliente para beber o comer e incluso si querían una prenda más abrigadora.

Vela sentía un calor extenderse por todo su pecho al sentir el cariño y la preocupación de sus amigos.

Luego de un rato de charla, llegó un rubio corriendo a la mesa de Hufflepuff, cosa que extrañó a todos, él nunca iba a otra mesa que no fuera la de Slytherin, menos aún a la mesa de los tejones

—¿Qué hacías ahí abajo, Vela? ¿Estás bien? —él la abrazó y ella devolvió el abrazo con una pequeña risita —. No te rías, me has preocupado

—Estoy bien, Draco, tranquilo

—Es un alivio, si te pasara algo... tío reduciría Hogwarts a cenizas

Ella se sonrojó, pensando en la probabilidad de que algo así sucediera y, mientras más lo pensaba, más pensaba que tenía razón.