Naruto: El lobo gris del ojo blanco.

E25. Un recuentro, una despedida.

Antes de comenzar, aclaro que no soy dueño, ni me pertenecen los/as personajes e imágenes utilizados para la creación de esta historia. Lo único que es de mi propiedad es la historia.

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- Diálogos.-

- Pensamientos.-

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- Miércoles -

Después de 3 largos días acompañando personalmente a la joven, Esdeath. Pero no todo fue malo, tenía varios puntos en la herida de su costado izquierdo, había abastecido sus suministros, recompuso su Chakra y lo mejor tuvo una de las mejores sesiones de Sexo, de su vida.

Esdeath, era una mujer sumamente maravillosa, cada curva de su cuerpo con forma de reloj de arena, sus pechos, sus muslos grandes y su gran trasero. Habían deleitado completamente a, Naruto. Sacudió su cabeza para ignorar, sus más profundos deseos.

Esdeath, había logrado moverlo discretamente por el País de la Tierra, ahora estaba en medio de la frontera de Ishigakure y Amegakure, la situación pareciera no ser la mejor en estos momentos. Había muchos cuerpos siendo devorados por las aves carroñeras, ninjas de Sunagakure, Amegakure y ninjas del ejército ya movilizado de Iwagakure, estaban por toda la frontera.

Naruto, suspiro saco un cigarro de su funda, lo puso en su boca y lo encendió. Inhaló el humo en sus pulmones antes de expulsarlo, por la boca. Comenzó a caminar hacia el interior de Amegakure, Rodear y caminar por la frontera, era igual de peligro que entrar a la aldea de Hanzo.

El terreno es algo más montañoso, con formaciones rocosas irregulares y acantilados que rodean Amegakure. Estas montañas y colinas proporcionan un entorno natural de difícil acceso, lo que le da a la aldea una ventaja defensiva. A causa del clima y el entorno industrial, no hay mucha vegetación. La naturaleza parece limitada, con algunos árboles dispersos y plantas que crecen entre las grietas de las estructuras metálicas.

- Deberían darle una clase a, Hanzo. de cómo ser un digno líder para su aldea.-

Naruto tenía una mueca de disgusto, sin que el lo supiera o imaginara, estaba siendo observado por una persona.

- Espero y estés listo para este momento, Naruto.- La persona susurro en el aire, antes de desaparecer con una corriente de aire. Prepararia el salón para el baile que tendría.

Naruto comenzó a caminar con cautela cerró su ojos azul, dejando solo la vista para su ojo Byakugan. Quería centrarse en solamente, la vista de su ojo regalado.

La lluvia se había intesidicado, el cielo estaba demasiado triste, como si hubiera a suceder una catástrofe. Naruto se detuvo y quedó espalda con espalda, con un sujeto que se materializó en una corriente de aire.

- Un placer verte de nuevo, Mukai-Sensei.-

Mukai Kohinata, no respondió ambos se giraron al mismo tiempo y chocaron cada uno un kunai, haciendo fuerza para ver quién podía dominar al otro. El Byakugan de Naruto, ahora veía dos pares de ojos Byakugan.

- Has crecido bien, Naruto.- Después de muchos años, la voz de Mukai Kohinata, seguía prácticamente igual, la misma neutralidad, seriedad y seguridad que recordaba.

Ambos se alejaron y se arrojaron el kunai, los cuales se anularon mutuamente. Los dos sujetos se quedaron de frente, observándose. Naruto vestía la ropa con la que se infliltro en el castillo del Daimyō de la Tierra. Pero por otra parte Mukai Kohinata seguía igual, su cabello seguía igual de largo, lacio y su característico color marrón, contrastaba con el blanco de los ojos Byakugan.