Mascota de la casa // Traducción Dramione

49: Un león agazapado

Anteriormente en House Pet:

Después de una brutal ejecución dirigida por Titus, Finch se suicida y Hermione lucha por encontrar una razón para vivir después de lo sucedido. Al final, decide seguir adelante por sus seres queridos y por venganza.

A través de todo esto, descubre que Draco está dispuesto a mutilar su alma para recuperarla, y Titus cree que puede volver a ganar el amor de Hermione si hace que su vida sea lo suficientemente cómoda.

Después de ser incitado a una reacción por Nera Zabini durante una gala, Titus obliga a Hermione a tener un orgasmo en su oficina como castigo. Ella va al baño después, encontrando a un bailarín muggle llamado Ángel, quien la entrena sobre cómo manipular a Titus para obtener lo que finalmente quiere: la libertad.

___________________________________________________

Dos semanas antes de Navidad, Hermione comenzó su plan en una tarde fría, trepando al árbol más grande de la propiedad, raspándose las rodillas con la corteza mientras ascendía. De la multitud de árboles en los terrenos de Nott, el grueso tronco del roble, junto con ramas fuertes y bajas, le dijo que podría haber sido el más viejo.

Le encantaba trepar al árbol centenario cuando era niña. Junto con Theo, trepaba hasta la cima, disfrutando de la amplia vista. A pesar de que la altura generalmente la mareaba, nunca la aterrorizaba como lo hacía volar.

O, al menos, no solía tener miedo.

A mitad de camino, empezó a reevaluar la inteligencia de subir tan alto, las ramas crujían bajo sus palmas mientras probaba su peso.

A pesar de que su estómago se hundía, continuó hasta llegar a una extremidad que casi se rompe, y entonces decidió que había llegado lo suficientemente alto como para que su afirmación fuera creíble.

Acomodándose en el lugar curvo entre el tronco y la rama, Hermione se permitió un momento para disfrutar de la vista. Las hojas de la mayoría de los árboles habían caído hacía mucho tiempo, dándole una panorámica despejada del cielo invernal, gris como las estatuas de hormigón en el laberinto de setos. La fría belleza la calmó cuando comenzó su espera, haciendo todo lo posible por soportar el viento helado tapándose la boca con las manos y respirándolas.

Cuando Bitty finalmente apareció en la base del árbol, el sol había caído y tocaba el horizonte.

"¡Señora Hermione!" Las orejas del pequeño elfo se movieron. "El maestro Titus está esperando en el comedor".

"No puedo ir".

—Pero señora...

"No es que no vaya. Realmente no puedo. Estoy atrapado aquí arriba. ¿Vas a buscar a Titus para que me ayude a bajar?

Los ojos de Bitty se abrieron de par en par con preocupación. —De inmediato, señora.

Unos minutos más tarde, Hermione observó cómo una figura volaba hacia ella a un ritmo constante. Los restos de la luz del sol lo rodeaban, por lo que entrecerró los ojos, encontrando difícil ver hasta que Titus se cernía frente a ella en una Saeta de Fuego.

Miró hacia abajo y luego hacia arriba. —¿Por qué coño estás en el árbol?

—Yo estaba... no te rías de mí —trató de fruncir el ceño—. "Estaba escalando como solía hacerlo, pero subestimé cuánto más pequeño solía ser".

Su rostro frunció el ceño de repente. "Esto no es como el estanque, ¿verdad?"

"Si quisiera suicidarme, lanzarme desde grandes alturas no sería mi método preferido. ¿No me conoces de nada?