Burbuja

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Holaa!!¿Cómo están? Espero que bien. Hoy es día de música!!! Pensé que con los estudios estaría muy ocupada pero solamente estoy ocupada por un tiempo, luego tengo la suerte de poder tener un tiempo para mi, osea, que con suerte y si me organizo bien, podré escribir más seguido, que es lo que quiero la verdad, me gusta mucho ver que leéis con alegría y que os gusta, como a mí el escribir como tal no me cuesta nada, pues si tengo oportunidad, si el tiempo me lo permite, alomejor os caerá un capítulo sorpresa a lo largo de la semana, no se sabe 😉.

Ahora sí, os dejo leer el capítulo.

Disfruten.





Fina se asustó al oír una voz cerca de ella, se dio la vuelta y vio a Marta, tras ver ese océano que escondía la mirada de su prometida, se relajó.

¿Puedo?- preguntó la rubia, mirando alrededor, concretamente a las pocas personas que habían en la cantina, no sé alarmó mucho, pues todos saben que le tienen mucho respeto y también sabe que todos están al tanto de que Fina es dependienta de la tienda, y más que tenía la ropa de trabajo puesta.

Por supuesto- respondió Fina, mirando también alrededor mientras hablaba lo más bajito posible para que solo Marta la escuchara.

~La rubia se sentó y comenzaron a hablar un poco de todo~

Cambiando un poco de tema- la rubia cogió y sacó del maletín que llevaba (más el bolso) un documento guardado en una carpeta- esto es lo que le tienes que entregar a...Luis...- dijo el nombre del perfumista un poco más bajo que el resto de palabras.

Gracias. Y tranquila miamor- susurró acercándose lo más que pudo a Marta- iré sin ningún tipo de problema, sé lo que quiero y es a tí y nada ni nadie me va a hacer cambiar de opinión- Fina cogió los papeles y a la vez que los acercaba hacia ella, la sombra que daba el papel la usó para acariciar la suave mano de su jefa- tengo que ir a mi habitación, tengo cosas por hacer, luego me paso por tu casa.

La morena hizo el amago de levantarse, pero nada más hacerlo, se vio obligada a volver a sentarse. Había llegado el padre Mateo preguntando por ella.
Fina! Estás aquí- dijo el cura- ¿Sabes dónde está Claudia?- preguntó este, pues eran las 17:40 pasadas- no la he visto desde esta mañan...desde ayer que pasó por la parroquia.

Tiene que estar al llegar, fue con Gaspar a Toledo a buscar unos papeles para el lanzamiento del nuevo perfume- contestó Fina, invitando a Mateo a sentarse en una de las dos sillas que quedaban libres alrededor de la mesa que compartía con Marta. Este accedió y se sentó.




En el laboratorio~zona de paquetería-

Luis había ruborizado a Rafael con su pregunta, ambos entraron en un juego del que deseaban no salir nunca. Después de la simple pregunta de Luis, ambos empezaron con el juego de las miradas, haciendo sus respectivos trabajos, no había nadie más, era como una nube, un comienzo de...

Rafa! Joaquín me dijo que tenía que hacer esto contigo- Tasio rompió la burbuja invisible creada por los dos hombres- yo voy a empezar mi turno ahora, solo me quedan unos minutos para comenzar mi turno así que, un minuto más, un minuto menos, que más da.
Tanto Luis como Rafael mantuvieron la mirada en Tasio, les había chafado el cálido ambiente que había en el trabajo.- Pero que he hecho yo ahora, ¿Tengo monos en la cara acaso?- el moreno entró a las sala y se puso al lado de Rafa, comenzó a sacar las cajas que había en la otra parte de la mesa que era su parte, ahí estaba lo que necesitaba para hacer el encargo del jefe.

Si por amor fueraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora