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El clima era tenue las nubes grises rodeaban cualquier rasto del cielo azul sin embargo de ellas ni una sola gota de agua caían,el aire era frío y todo aquello rodeaba con una frialdad aquel castillo,los murmullos iban y venían,la familia Real si que estaba hecha un caos,pero por un momento por un solo segundo parecía que las cosas se resolverían.

Sorpresa y esperanza es lo que ese omega estaba aportando al castillo el cual aun en el silencio se encontraba lleno de gente, el olor a mar era parte del ambiente puesto que los 35 marineros de alto rango de la casa velaryon llacian inmobiles tras la puerta de una habitación,pues dentro de ella su hermosa perla de mar se encontraba descansando después de a ver sido robada sin más.

–Están aquí desde hace 5 días,porque no descansan mis Lores.-Aquella voz cansada resonó sobre aquellos hombres que se mantenían en guardia.

–Mi reina rechazamos la oferta...nosotros nos quedaremos donde nuestra perla se encuentre

–Es una promesa que nos mantiene con vida hasta ahora

–Nosotros estaremos aquí para rendir nuestro respeto y lealtad a nuestro Lord

–Estaremos aquí hasta el final de los días de la perla así que porfavor déjenos estar aquí hasta que recupere la conciencia.

Rhaneyra realmente no entendía que había hecho su hijo para que más de 5000 marineros estuvieras dispuestos a todo por el,incluso de dar su vida si era necesario.

Después de que Daemon regresara de Velamonte lo que traía cargando en brazos fue algo que jamás imagino volver a ver,su corazón nuevamente dio un giro de 360 grados,puesto que su hijo,su dulce niño regreso sin haberlo esperado,su hermoso lucerys estaba nuevamente en sus brazos aún inconsiente el estaba ahí con ella,las lagrimas habían salido con fuerza al sentir su latido nuevamente junto a su preciosa respiración puesto que su dulce niño regreso al fin a casa.

5 días habían pasado desde aquel suceso,5 días en los que Lucerys se negaba a despertar después de ver aquella pelea entre los fuegos más abrazadores de todo westeros,5 días en los que Rhaneyra no se habia apartado de su lado,5 días en los que 35 de los más altos mandos de la flota Velaryon esperaban pacientes su despertar,5 días en los que 5000 hombres esperaban navegando en las costas por su despertar,5 días en el que incluso el mismo Jacaerys se encontraba con el sin soltarlo ni un segundo buscando en las pequeñas manos de su hermano consuelo,5 días de los cuales no se sabía nada de los hermanos fugitivos de la reina.

–Jacaerys....ve a descansar a tu habitación las ojeras ya no pueden más contigo hijo.-Rhaneyra nuevamente se acercó a su hijo mayor intentando peinar un poco de sus cabellos revueltos sin embargo aquel omega rechazo su toque dando un ligero retroceso al ver que se acercaba.

–También planeas quitarme esto?...Si no fuera por Lucerys no quisiera verte ni en pintura.-Jacaerys quien se mantenia siempre sosteniendo de la mano a su hermano tenso ligeramente ese agarre al decir aquellas palabras y sin esperar alguna respuesta simplemente giro su rostro en dirección a lucerys recostando la cabeza en su pecho y esperando paciente por el.

Rhaneyra también estaba cansada pero por el momento respetaría la decisión de su hijo,ella simplemente tomó asiento alado de la cama de lucerys y junto a su hijo mayor se mantuvieron en silencio como lo habían estado haciendo esos 5 días,para Rhaneyra toda la situación estaba agotandola,primero estaba Jacaerys y su situación con Aegon,también Aegon y su salud,al igual que ahora sus hermanos que decidieron irse sin dejar alguna pista de su paradero,al igual que la reciente muerte de la serpiente marina que por ello toda su flota estaba esperando por lucerys incluso más que ella que era su madre,y sin contar a su hijo el cual se negaba a despertar por alguna razón.

MY ONLY LIGHT || Lucemond Donde viven las historias. Descúbrelo ahora