Destino +18

Capitulo 21

Valentina Hernández

Un viaje repentino, que no me genera confianza en lo absoluto ayer nos explicaron toda la situación solo somos piezas en su rompecabezas, no somos nada en general solo necesitan algo de nosotras y nosotras no tenemos nada a mejor que hacer que seguirles la corriente, me encuentro arreglando mi maleta de viaje, mi día comenzó algo movido y sí lo digo así porque empezó con los gritos de Alejandra y digo no está mal que sé grite cuando se asusta lo que está mal es que tú amigo valla a revisar porque gritas y te vea amordazada y amarrada de la cama mientras tú culito te estaba penetrando como si no hubiera un mañana.

Juro que no vuelvo a entrar a su cuarto en mil años aunque grite ahora sí por miedo, la muy malparida le gritaba por más y decía que era suya esa imagen no se va a borrar de mi mente o bueno no por mucho tiempo, tengo buena memoria para algunas cosas por ejemplo el chisme.

Marcela entra a mi cuarto y se queda viendo el desorden que es actualmente, viene vestida con unos jeans azules y blusa del mismo color con su cabello suelto y rizado realmente hermosa.

- Ya me acaban de llamar, ya casi llega el auto- me informa y yo solo empiezo a meter ropa sin control alguno.

- No se que llevar al viaje, y de verdad estoy asustada- me siento en el suelo y simplemente quiero aire viajar me aterroriza.

~¿Que tal y se cae el avión?~

-¿Les tienes miedo a la familia de él o a el viaje en si?- su pregunta me sorprende ya que es de la nada, y me pone a sobre pensar.

Sí le tengo miedo al viaje pero mis nervios van más allá de esto, no le tengo miedo a su familia siendo sincera solo son nervios que nacen de la nada y no sé cómo actuar sobre esto, solo sé que no pienso soportar un trato desagradable de su parte el compromiso se romperá su eso llegará a pasar de eso fue lo primero que hable con Alessandro.

- Podría decir que a los dos, pero como soy una psicóloga profesional sé la manera de controlar mis emociones, ¿No es así Marcela?- la miró de pies a cabeza y ella solo suelta una risa nerviosa.

- Si lo dices por las sirvientas yo solo acabe con su vida de una sola vez así que bueno, no me juzgues vale- la última parte me la grita en modo de defensa.

Siempre a sido así, no le gusta aceptar sus errores o bueno no siempre las veces que lo hace se arrepiente sinceramente y eso es algo que admiro aunque no la estoy juzgando por eso y ella en el fondo lo sabe.

- Solo creo que no fue la forma indicada de hacerlo, o bueno no como yo lo haría.

- Sí, ¿como lo harias tu?-Me mira con ojos curiosos y se acuesta en la cama.

- Iría a la cocina buscaría un cuchillo junto con un trinche, con el trinche les quitaría los ojos y con el cuchillo le rebanaria el cuello no sin antes hacer cortes por todo su cuerpo y puntos sensibles- me mira aterrorizada por lo que acabo de decir- A se me olvidaba y les cortaria la lengua dándose la a tragar a la siguiente y eso antes de hacer todo lo anterior.

La miró con una sonrisa tierna y ella solo se echa a reír a carcajadas por mi comentario, cualquiera pensaría que estamos locas o algo así solo somos personas con una oscuridad infinita por dentro que sale a flote cada que hay un problema.

~ todo ser humano tiene esa oscuridad en su ser solo tienes que descubrirla y usarla a tu favor y eso es simple ~

- Yo creía que ibas a juzgarme, en fin tú y tus maneras únicas de asesinar- mientras habla va hacia mí espejo y se pinta los labios allí.

Aquí es así se habla del asesinato y la muerte como si fuera nada porque lo es si estás vivo en algún punto morirás, incluso hay personas que están vivas en su exterior y muertas por dentro así funciona esta sociedad, fingir que estás bien es el pan de cada día y los hipócritas el postre.