V3C2: Una cuestión de perspectiva

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Adam Taurus estaba más que furioso. Si bien por lo general estaba enojado o descontento por una cosa u otra, lo que sentía ahora era de un nivel completamente diferente. Era un nivel de rabia que no había sentido en mucho tiempo y su fuego se sentía bien. Agudizaba sus sentidos y le daba una mayor sensación de claridad. Lo motivaba a actuar. Lo hacía hacer las cosas y ya era hora de que les mostrara a esos tontos humanos lo que significaba tener éxito.

Y todo fue por culpa de ese hombre molesto. Ese chico que había aparecido de la nada y masacrado a sus hombres. Su amada había sido frustrante al ponerse del lado del enemigo, pero él le mostraría cuál era su lugar y ella volvería arrastrándose hacia él. Eso era inevitable. ¿Pero este chico? ¿Este Emiya Shirou? Adam no toleraría nada menos que su aniquilación total. Ver cómo la vida abandonaba lentamente sus ojos mientras se desangraba en la espada de Wilt.

Esa imagen trajo una sonrisa salvaje a los labios de Adam mientras se abría paso a través de su campamento base, sus hombres se apartaron como el agua ante su ira y le dieron un amplio margen. Sí, había terminado de jugar según las reglas de esos humanos . No importaba qué tipo de poder poseyeran, él era más fuerte que ellos. Solo había accedido a su solicitud de hombres por preocupación por las bajas que sufriría por el fuego cruzado, pero nada más. Ya había perdido innumerables hombres a manos de ese chico, ¿qué eran unos pocos más?

Adam apartó las solapas de su tienda y se quedó paralizado al ver al que quizás fuera el segundo humano más molesto de Remnant. Aquel cuyo estúpido plan le había costado tanto dinero. Sin embargo, estaban haciendo todo lo posible por recuperar el primer puesto, ya que estaban sentados en su silla como si fueran los dueños del lugar.

—Cinder —gruñó Adam mientras avanzaba hacia la tienda y dejaba que la solapa se cerrara detrás de él. Su mano izquierda apretó con más fuerza a Blush mientras su pulgar avanzaba lentamente hacia la tsuba de Wilt.

—Hola, Adam —dijo Cinder Fall con una sonrisa superior que hizo que Adam no quisiera hacer nada más que quitarle la cabeza de los hombros.

—Nuestro trato se canceló —dijo Adam sin preámbulos—. Todos sus planes han fracasado y no han hecho más que costarme demasiados hombres.

—No diría que han fracasado, todo lo contrario —respondió Cinder con suavidad, sin que le afectaran las monstruosas cantidades de instinto asesino que Adam estaba liberando—. Aunque las cosas no han ido exactamente según lo planeado, diría que todo ha ido saliendo a la perfección.

"¿Llamas al desastre que Mountain Glenn estaba preparando?" dijo Adam en voz baja mientras su pulgar se movía contra la tsuba de Wilt, liberando ligeramente la espada del agarre de Blush.

"De hecho, así es. Todas las piezas están ahora en su lugar para un final glorioso ".

"Explicar."

Cinder no creía que le debiera una explicación a Adam, pero se sentía magnánima y se la dio de todos modos. "¿No lo ves? La gente de Vale es tan esperanzada y optimista como es posible. Los valientes estudiantes de su preciada Academia Beacon lograron frustrar un ataque terrorista y luego detuvieron un asalto de los Grimm el tiempo suficiente para que el ejército de Atlas llegara y salvara el día. Están muy contentos con su victoria y su fe en sus héroes es más fuerte que nunca. Dado todo eso, ¿cuánto más crees que les dolerá cuando sus héroes se derrumben ante ellos?"

Remnants of Fate By ZelenalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora