Remnants of Fate By Zelenal

V2C4: Inicio de la investigación

Pyrrha Nikos suspiró mientras salía de la clase del profesor Port. Era apenas el primer día del nuevo semestre y ya le estaban dando dolores de cabeza las interminables divagaciones del profesor Port. Por supuesto, nunca se quejaría y las historias del profesor eran más o menos todas ciertas (Pyrrha había comprobado algunas de ellas un día), pero eso no hacía que fuera menos agotador.

Para empeorar las cosas, sus vacaciones de invierno habían sido... interesantes, por decir lo menos. Nora y Ren se habían quedado en Beacon, afirmando que realmente no tenían ningún otro lugar a donde ir, y Pyrrha también se había quedado porque su familia estaba en Mistral. Lo sorprendente fue que Jaune también se quedó a pesar de que su familia vivía en Vale. Los demás habían intentado que se fuera con su familia, pero él insistió en quedarse, diciendo que quería pasar tiempo con su equipo.

Con todo ese tiempo libre en sus manos, una de las cosas que Jaune pidió fue que pasaran más tiempo entrenando. Parecía que lo que sucedió con Ruby, Blake y Shirou en los muelles lo hizo tomarse aún más en serio la corrección de su falta de habilidad. Sus sesiones de entrenamiento, que alguna vez habían sido asuntos bastante casuales, ahora eran intensas y a menudo duraban varias horas hasta que el Aura de Jaune finalmente se rompía. Pyrrha ciertamente aplaudió su dedicación y el esfuerzo no fue en vano. El nivel en el que se encontraba actualmente era mucho mayor que el que había tenido anteriormente.

Junto con el aumento del tiempo que pasaban juntos entrenando, también aumentaba el tiempo que pasaban haciendo otras cosas juntos. Siempre que no estaban entrenando o repasando la teoría del combate, pasaban el tiempo hablando de todo tipo de cosas. Ella aprendió sobre sus siete hermanas y la dedicación insana de su familia al juego de mesa Peril; él aprendió sobre sus padres y los estrictos regímenes que tuvo que seguir prácticamente desde su nacimiento. Ella aprendió la historia detrás de Crocea Mors y su abuelo; él aprendió sobre el vergonzoso incidente que la llevó a despertar su Semblanza.

Si bien todo eso había sido agradable, las cosas se habían vuelto un poco amargas solo dos días antes. Después de que terminaron el entrenamiento del día y Jaune estaba tendido en el suelo, había hecho el comentario de que su encuentro debía haber sido el destino dado lo bien que había funcionado todo y afirmó que si Pyrrha no hubiera venido a Beacon ese año, habría muerto en el Bosque Esmeralda. Si bien el comentario fue dicho de manera positiva, había destruido instantáneamente su buen humor y le tomó un esfuerzo concentrado no dejar que Jaune viera nada.

¿Había sido el destino de Pyrrha conocer a Jaune? A ella le gustaba Jaune por muchas razones y una de ellas era lo completamente normal que era. Era una buena persona y tenía potencial pero, hasta donde ella podía ver, no había nada especial en él. No como el resto de su equipo que ocultaba algo o el Equipo RWBY que eran todos de distintos niveles de especial (en su mayoría en el extremo superior de "muy") o Shirou que era tan obviamente especial que honestamente sentía pena por él. No, Jaune era solo un tipo bastante normal y esa sensación de normalidad era algo que Pyrrha necesitaba desesperadamente.

Pero ¿y si Jaune tenía razón? ¿Y si conocerlo era el destino? ¿Y si él era solo una parte de un plan mayor para hacerla aún más especial? ¿Y si esta sensación de normalidad se le estaba otorgando solo para que algún evento posterior le doliera aún más? Tantas preguntas pasaban por la cabeza de Pyrrha que casi la mareaban. Si conocer a Jaune era realmente el destino, eso solo hacía surgir la única pregunta que Pyrrha se había estado haciendo durante años:

¿Tenía ella algún control sobre su vida?

Pyrrha casi siempre había sentido que estaba destinada a convertirse en una gran Cazadora y salvar el mundo. Si bien sus habilidades ciertamente eran el resultado de incontables horas de trabajo duro, también provenían de una gran cantidad de talento natural. Luego estaba el hecho de que su Semblance era increíblemente poderoso y podía usarse para hacer mucho bien. Siempre se había lanzado voluntariamente hacia este destino sin quejarse realmente, ya que sentía que era su deber ayudar a las personas, pero, a medida que envejecía, no pudo evitar preguntarse si ese deseo también era el destino.