Capitulo 20

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¿Cómo puedo olvidar ese instante en que nuestras miradas se cruzaron por primera vez bajo esa escasa luz de noche, cuando sus ojos perforaron la barrera que había construido en mi interior?. Él estaba allí, tan complicado de amar, tan difícil de entender, pero tan imposible de olvidar.

Cada día me preguntaba cómo podía haberme enamorado de un corazón tan cubierto de espinas y marcado por heridas sin sanar, y cada día mi mente me respondía con la misma certeza.

Quizás, yo era la masoquista que se sentía atraída por alguien que había vivido un pasado aterrador al igual que yo pero, en el fondo también pensaba.

El también es servicial y bondadoso, atento a las necesidades de los demás. Su estricta disciplina refleja de su lucha interna, una batalla constante por mejorar, aunque el camino fuera arduo y le costara más de lo que yo podía imaginar. Lo más fascinante, lo que realmente me atrapaba, es su resiliencia. Atrapando todo ese dolor, de las caídas, de las traiciones y de sus propios demonios,  impulsándose para hacerse más fuerte.

Y ahí estaba, protegiendo a quienes amaba, incluso cuando eso significaba ir en contra de sus propios principios, cuando al hacerlo se destruía a sí mismo. Porque si había algo que jamás rompería eran sus promesas. Su lealtad era inquebrantable, sin importar  el daño que le pudiera causar.

Ese era el verdadero recordatorio del por que me enamoré del hombre más complicado y difícil, fue su lealtad.

Cuando sus brazos temblorosos  me envolvieron, todo el ruido desapareció. Sentí su calor. No importaba lo complicado que fuera, ni las espinas que rodeaban su corazón. En ese abrazo, supe que lo amaba, profunda e incondicionalmente.

Y si ya había recorrido todo este camino solo para asegurarme de su bienestar, aunque no cambiara nada en nuestra historia, al menos me aferraría a la idea de que estos días que permanecería aquí, servirían como una despedida genuina. Esa despedida que tantas veces quise tener y que siempre me fue arrebatada por el destino o por nuestras propias decisiones.

Quizá, al darle un cierre digno, podría finalmente liberarme de las cadenas invisibles que me ataban a él. Me lo repetía una y otra vez, como si al decirlo en voz alta pudiera convencerme de que sería suficiente para apagar el fuego que seguía ardiendo en mi pecho. Pero sabía que no sería fácil, que cada mirada, cada roce, me haría dudar, me haría cuestionar si realmente quería dejarlo ir, por qué no quería hacerlo pero debía.

Después de todo, Hassem no era solo mi tormento, también había sido mi refugio, mi constante, aunque eso significara vivir bajo su sombra, atrapada en un lazo emocional tan fuerte que a veces sentía que no podría romperlo. ¿Pero acaso no merecía ser libre? Libre de su mirada que, aun en la distancia, me seguía controlando, libre de su presencia que me dejaba sin aliento y al mismo tiempo me asfixiaba.

Lo más duro sería recordarle que esta despedida no era un adiós entre lágrimas, sino el cierre de un capítulo que, aunque lleno de cicatrices, necesitaba terminar. Sabía que en el fondo él lo entendería, porque a su manera, también había estado atrapado, intentando cumplir con las promesas de una vida que ya no existía. ¿Acaso no era justo que ambos encontráramos la paz?

Apreté los puños mientras el sonido de mi respiración se mezclaba con el latido errático de mi corazón. Me quedaban pocas horas antes de enfrentarlo de nuevo, y con cada minuto que pasaba, sentía que me faltaba el aire. Este sería el fin, mi despedida de Hassem, de su tormento, de su luz y su oscuridad. Y esta vez, lo haría por mí, para dejar de ser la mujer encadenada a su jeque árabe, y convertirme en la mujer que, por fin, elegiría su libertad.

Yo resolvería mis propios problemas con Nicolás, eso estaba claro. No podía seguir arrastrándolo a este juego peligroso en el que me encontraba atrapada. Con Malih preso en Estados Unidos y Nicolás en la mira de las autoridades, las cosas, por caóticas que fueran, parecían estar mejor, o al menos más controladas, si eso era posible.

Árabe Encadenada A Ti [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora