Chispa

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Mientras Marinette sonreía, una sensación de alivio la recorría al saber que Adrien estaba de su lado. Era un secreto pesado de llevar sola, pero ahora había alguien más que lo compartía, alguien en quien confiaba.

Marinette: -Gracias, Adrien. No tenía idea de que me conocías tan bien... y tampoco esperaba que me entendieras de esa forma. Es un alivio saber que no estoy sola en esto-

Adrien: -Siempre has sido más fuerte de lo que crees, Marinette. No necesitas esconder lo que eres. Todos tenemos nuestras luchas y nuestros secretos. Lo importante es encontrar a las personas que nos apoyen a pesar de ellos-

Marinette: -Voy a trabajar en eso. Es difícil, pero con tu ayuda, creo que puedo hacerlo-

Adrien le ofreció una cálida sonrisa, y el ambiente en la gran biblioteca pareció hacerse más ligero, menos intimidante. Los libros a su alrededor ahora representaban oportunidades y conocimiento, no peligros ni secretos oscuros. Marinette miró el libro que tenía en las manos y lo sostuvo con más confianza.

Adrien: -Vamos, te ayudo a buscar más cosas que puedan ser útiles. La magia no debería ser una carga para ti. Juntos encontraremos la forma de hacer que funcione-

Marinette respiró hondo, sintiendo una oleada de alivio y gratitud hacia Adrien. Saber que ya no llevaba sola el peso de su secreto le dio una chispa de confianza renovada. Mientras sostenía el libro entre sus manos, algo cambió dentro de ella: una pequeña chispa de luz y fuerza interior que estaba lista para crecer.

Marinette: -Gracias, Adrien. Creo que, por primera vez, estoy empezando a ver mi magia como algo que puede ser parte de mí… sin miedo-

Adrien: -Siempre puedes contar conmigo, Marinette. No tienes que enfrentarlo sola, ni ahora ni nunca. ¿Te acompaño a leer ese libro? Podríamos intentar descubrir cómo puedes controlar tu magia juntos. A lo mejor yo también aprendo algo-

Marinette miró a Adrien con una mezcla de sorpresa y gratitud. La idea de que alguien la acompañara en este viaje de autodescubrimiento hacía que el camino pareciera menos incierto y aterrador.

Marinette: -Eso sería genial. Sería mucho más fácil si no lo hago sola... y me encantaría que aprendieras conmigo. Tal vez juntos descubramos algo nuevo sobre la magia-

Adrien asintió, y ambos se dirigieron hacia una mesa en la biblioteca, rodeados por las estanterías imponentes. El silencio del lugar les brindaba una sensación de calma, mientras el brillo suave de la luz cálida caía sobre las páginas abiertas del libro. A medida que Marinette empezaba a leer, sintió la chispa de emoción crecer dentro de ella, una chispa de esperanza que le recordaba que tal vez, con el tiempo, podría abrazar completamente su naturaleza mágica.

Adrien, sentado a su lado, le ofrecía apoyo silencioso pero constante, y mientras ambos se sumergían en el conocimiento antiguo y misterioso de la magia descontrolada, algo quedó claro para Marinette: no estaba sola. Juntos, enfrentaban un futuro lleno de retos, pero también de oportunidades para crecer, tanto como individuos como en su amistad.

Marinette hojeó las páginas del libro mientras la suave luz de la gran biblioteca iluminaba las antiguas palabras. Cada línea parecía resonar con su situación actual: equilibrio, control y aceptación de la propia naturaleza mágica. A su lado, Adrien la observaba con curiosidad y un toque de admiración.

Adrien: -Parece que este libro tiene lo que buscas... Es curioso cómo el conocimiento está siempre a nuestro alcance, pero a veces necesitamos a alguien más para darnos cuenta de ello-

Marinette asintió, pensando en lo afortunada que se sentía en ese momento. Había vivido en secreto por tanto tiempo, temiendo lo que otros pudieran pensar, pero ahora, con Adrien a su lado y sus amigos apoyándola, la chispa de confianza en su interior comenzaba a crecer.

Hadas y BrujosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora