Hadas y Brujos

Lecciones

El grupo de amigos se encuentra almorzando en el comedor, disfrutando de un respiro en medio de sus agitadas vidas estudiantiles. La cafetería estaba llena de estudiantes, algunos riendo entre charlas animadas, otros sumidos en sus propios pensamientos. Marinette observaba el entorno mientras saboreaba una ensalada, sintiéndose más tranquila. El caos que había sentido desde que llegó a este mundo parecía estar desvaneciéndose poco a poco, gracias a la compañía de sus amigos.

Kagami, sentada aun lado de Félix, observaba la expresión relajada de Marinette con una sonrisa de satisfacción, como si viera los frutos de su apoyo en la serenidad de su amiga. Kagami tomó un sorbo de su bebida y se inclinó ligeramente hacia Marinette.

Kagami: -¿Ves? Te lo dije, Marinette. Con el tiempo, todo empieza a encajar para ti-

Marinette sonrío tímidamente, agradecida por las palabras de Kagami.

Marinette: -Lo sé… Siento que finalmente estoy empezando a entender cómo funcionan las cosas aquí. Todavía me queda mucho por aprender, pero gracias a ustedes, todo parece un poco menos aterrador-

Félix: -Adaptarse a este mundo no es solo cuestión de sobrevivir. Es aprender a prosperar a pesar de las circunstancias. Y ya estás en camino, Marinette-

Adrien, se unió a la conversación con una sonrisa cálida.

Adrien: -Lo importante es que no estás sola. Todos enfrentamos nuestros propios desafíos, pero juntos, podemos con todo-

Marinette los miró a todos, sus amigos que habían estado a su lado desde que llegó a este nuevo mundo. Kagami, siempre firme y segura; Félix, con su aguda intuición y silencioso apoyo; y Adrien, con su bondad que siempre lograba calmar cualquier tormenta interior. Marinette se sentía más fuerte con ellos.

Mientras almuerzan a lo lejos ven a Chloe como de costumbre, movía entre los estudiantes con la misma seguridad con la que una reina se pasea por su reino. Chloe se detuvo en una mesa cercana, rodeada de sus seguidores, lanzando miradas despectivas hacia Marinette y su grupo. La tensión en el aire era palpable; Marinette sentía cómo su corazón se aceleraba.

Marinette: -Parece que Chloé, siempre parece estar en su propio mundo, como si no le importara nada. Me pregunto qué la hace tan… arrogante-

Kagami miró en dirección a Chloe y luego volvió a Marinette, su expresión decidida.

Kagami: -No le des poder sobre ti, Marinette. Su actitud es solo un reflejo de sus propias inseguridades. No deberías preocuparte por lo que piense de ti-

Marinette asintió, intentando aplicar las lecciones que había aprendido. Sin embargo, ver a Chloe le provocaba un nudo en el estómago.

Félix: -Nadie se atreve a confrontarla, pero alguien debería darle una lección-

Adrien: -Aunque dudo que con una simple lección cambie-

Kagami frunció el ceño, sabía que Félix siempre le hacía bromas a Chloe para intentar darle una lección. A veces Adrien se involucraba, Félix sabía muy bien como convencer a su primo y, a pesar de sus reticencias, siempre terminaba participando en los planes de Félix.

Kagami: -Nada de tus "lecciones", Félix. Esa no es la solución-

Félix se encogió de hombros, una sonrisa juguetona en sus labios, como si el desafío que representaba Chloe fuera una fuente inagotable de diversión.

Félix: -Vamos, ¿no es divertido pensar en un plan? Tal vez deberíamos hacerle ver que no es la única que puede jugar-

Kagami, mirándolo con una mezcla de frustración y diversión, lo pellizco en el brazo.