Espadas Entrelazadas: Destino Escarlata y Alma de Acero

Capitulo 48: El sueño de la mariposa

Pensamientos

Diálogos

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El grupo se reunió temprano en la estación de Magnolia, con los boletos que Loke les había obsequiado en mano, listos para embarcarse en unas merecidas vacaciones. Gray observó los boletos, comentando en voz alta:

Gray: Loke fue muy amable al regalarnos esto. Deben haber sido costosos.

Natsu: ¡Estoy emocionado!

Exclamó Natsu, saltando de un lado a otro mientras Happy lo seguía volando.

Natsu: ¡Hace mucho que no vamos de vacaciones!

Erza, con Fou recostado cómodamente sobre sus piernas, como era costumbre, mantuvo una expresión tranquila mientras les respondía:

Erza: Deberían comportarse. Si Loke nos dio estos boletos, fue realmente gracias a Lucy y Shirou. Ellos fueron los que más lo ayudaron con su problema.

Lucy sonrió, restándole importancia al asunto.

Lucy: Eso no importa. Estoy realmente feliz de salir de vacaciones con todos ustedes.

Shirou, mirando por la ventana del tren mientras éste comenzaba a moverse, comentó en voz baja:

Shirou: Creo que un cambio de aires nos vendrá bien después de todo lo que ha pasado en tan poco tiempo.

Natsu, siempre curioso, se giró hacia Shirou al escuchar eso.

Natsu: Ahora que lo mencionas, quiero preguntarte sobre tu nueva espada.

Gray, frunciendo el ceño, intervino.

Gray: ¿Realmente era necesario traer tus espadas a unas vacaciones?

Shirou, encogiéndose de hombros, respondió con calma:

Shirou: Simplemente me siento más cómodo de esta manera.

Lucy, interesada en la conversación, lo miró con curiosidad.

Lucy: Parece que finalmente has terminado tu nueva espada.

Shirou asintió, y con un movimiento fluido desenvainó su nueva espada, Odenta Mitsuyo. En cuanto la espada quedó a la vista, una mezcla de asombro y admiración llenó el vagón. Lucy, Gray, Natsu, e incluso Happy quedaron impactados por la imponente presencia de la katana. Su hoja era negra como la noche, pero el filo tenía un tono carmesí, salpicado de pequeños puntos brillantes, casi como si fueran estrellas dispersas por el acero.

Lucy: Wow... es hermosa.

Susurró Lucy, maravillada.

Natsu: ¿Qué tan fuerte es esa nueva espada?

Preguntó Natsu con su habitual entusiasmo.

Shirou miró la katana con cierta contemplación antes de responder.

Shirou: No lo sé. Todavía no la he probado.

Gray, frunciendo el ceño, examinó la hoja más de cerca.

Gray: Nunca he visto algo así. Ese material no parece ser normal.

Shirou, guardando la espada nuevamente en su funda, explicó:

Shirou: Está hecha de un material llamado Seele Schneider.

Al escuchar ese nombre, Lucy pareció reconocerlo.