Espadas Entrelazadas: Destino Escarlata y Alma de Acero

Capitulo 34: Una promesa y un juramento: Batalla decisiva por Tesseram

Pensamientos

Diálogos

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Tras la intensa batalla y la sanación de Shirou por parte de Wendy, el grupo se preparaba para enfrentar a Cathal en la sala del trono. Antes de partir, Shirou se acercó a Muichertach, quien todavía estaba recostado en el suelo, reflexionando sobre su derrota, Shirou decidió preguntarle con la esperanza de obtener alguna ventaja en la próxima batalla.

Shirou: Muichertach, ¿tienes algún consejo para la pelea contra Cathal?

Muichertach levantó la vista, sus ojos se encontraron con los de Shirou. Por un momento, el guerrero permaneció en silencio antes de negar con la cabeza.

Muichertach: Ninguno

Lyon, aún desconfiado de las intenciones de Muichertach, cruzó los brazos con escepticismo.

Lyon: ¿No piensas cooperar ahora que ya fuiste vencido?

Muichertach sonrió levemente, pero la tristeza en sus ojos era palpable.

Muichertach: No es cuestión de lealtad a Cathal. Es solo que, sinceramente, no tengo ningún consejo que ofrecer.

Erza, buscando entender más a fondo, intervino.

Erza: ¿Por qué? ¿Qué te hace pensar que no hay nada que podamos saber para prepararnos mejor?

Muichertach suspiró y respondió con un tono reflexivo.

Muichertach: Porque creo que el Artesano puede vencer a Cathal.

La princesa Máel, sorprendida por la declaración, no pudo evitar cuestionar y preguntó, aún tratando de entender la complejidad de la situación.

Máel: ¿Cuál es la razón para creer algo así? Si fuera tan fácil, ¿por qué no tomaste el título de más fuerte tú mismo después de ganar el torneo los últimos tres años seguidos?

Muichertach se mantuvo sereno, pero sus palabras cargaban un peso considerable.

Muichertach: No lo hice por respeto a Cathal. Siempre he sabido que mi espada lo había sobrepasado. Pero... el respeto hacia él me impidió desafiarlo abiertamente.

Shirou frunció el ceño, confuso, preguntó, buscando una lógica en los actos de Muichertach.

Shirou: Entonces, ¿por qué iniciar una rebelión ahora?

Muichertach asintió lentamente.

Muichertach: Esta vez, estamos siendo ayudados desde el exterior. Por eso, decidimos actuar.

Máel, con un tono de alarma, indagó más.

Máel: ¿Quién es la persona que los está ayudando? Esto podría llevar a una guerra entre naciones si se trata de alguien de fuera.

Muichertach bajó la mirada, mostrando un indicio de lealtad hacia Cathal.

Muichertach: Por respeto a Cathal, no puedo decirlo. Pero puedo decirles esto: nuestro patrocinador le entregó a Cathal un frasco con una sustancia que nunca había visto antes y una lacrima de tamaño considerable.

Erza, procesando la información, hizo una observación.

Erza: Entonces, un mago los está ayudando.

Shirou, tomando un tono más pragmático, intervino.

Shirou: No tiene sentido hacer conjeturas ahora. Lo mejor es ir a pelear contra Cathal y averiguarlo directamente.