Escena 1: La Confesión
Orm se encuentra en su oficina, revisando las noticias en su computadora. Una sonrisa fría se dibuja en su rostro al ver que Krit se ha retractado de sus declaraciones y ha desaparecido del país.
Orm: (Con una voz suave) Así es como se juega.
De repente, la puerta se abre y entra Thanawat, con el rostro tenso.
Thanawat: (Con un tono preocupado) ¿Cómo es posible que Krit se haya retractado? ¿Y cómo ha logrado escapar?
Orm: (Con una mirada fría) No te preocupes, papá. Ya me encargué de todo.
Thanawat: (Con un tono autoritario) ¿Qué hiciste?
Orm: (Con una sonrisa enigmática) Le ofrecí un trato. Un trato que no podía rechazar.
Thanawat: (Con un tono de desconfianza) ¿Y qué ganaste con eso? ¿Por qué arriesgarte a perder a un testigo tan importante?
Orm: (Con una mirada penetrante) Porque era necesario. Para protegerte. Y para darle una lección al hombre que te está investigando y a su hija Lingling.
Thanawat: (Con un tono de confusión) ¿A su hija Lingling? ¿Quien es ella y por qué tienes que vengarte de ella?
Orm: (Con una sonrisa gélida) Sí. No me gusta que me cuestionen. No me gusta que me acusen. Y no me gusta que se metan en nuestros asuntos.
Escena 2: El Dolor de Lingling
Lingling se encuentra en su departamento, con el corazón lleno de rabia y frustración. La noticia de la retractación de Krit la ha dejado en shock.
Lingling: (Con una voz llena de tristeza) ¿Cómo es posible? ¿Cómo pudo hacer eso?
Lingling: (Con un tono de rabia) Se ha vendido. Se ha dejado comprar por Thanawat.
Lingling: (Con un nudo en el estómago) ¿Qué va a hacer mi papá ahora? ¿Cómo lo va a detener a Thanawat sin las pruebas de Krit?
La molesta Lingling, se retorcía de furia. Pero después se da cuenta que se está involucrado tanto, no sabía ¿por qué? Ella ni siquiera se había graduado aún.
Escena 3: La Llamada
Perspectiva de Thanawat:
Thanawat se encontraba en su oficina, la tensión en el ambiente era palpable. La noticia de la retractación de Krit le había estado molestando, aunque Orm su hija hizo eso para ayudarlo, no le gustó como lo resolvió, era mejor no dejar testigos, pero sabía que la batalla aún no había terminado.
Su mirada se posó en la fotografía de su hija, Orm, en su escritorio. Un sentimiento de orgullo y agradecimiento lo invadió. Orm siempre había sido su brazo derecho, su fiel ejecutora.
Thanawat tomó el teléfono y marcó el número de su hija.
Thanawat: (Con un tono de satisfacción) Orm, ¿cómo te sientes?
Orm: (Con un tono tranquilo) Tranquila, papá. Todo salió como lo plane.
Thanawat: (Con un tono de preocupación) Pero ¿qué pasará con Lingling? ¿Y con su padre?
Orm: (Con un tono calculador) No te preocupes, papá. Ya me encargué de eso.
Thanawat: (Con un tono de duda) ¿De qué hablas? ¿Qué hiciste?
Orm: (Con un tono de misterio) Solo me aseguré de que Lingling y su padre no se metan en nuestro camino.
Thanawat: (Con un tono de resignación) Está bien, hija. Confío en ti.
Thanawat colgó el teléfono con un suspiro de alivio. Sabía que Orm era capaz de cualquier cosa para protegerlo.
Fin del capítulo 14
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Orm y Lingling: La mafia y la ley
FanfictionEn una historia con tus personajes favoritos de GL Tailandesa Tiene drama, romance, con un toque de peligro y misterio.