Capítulo 30: La Larga Lucha (Día 2-4)

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Escena 1: Un Rayo de Esperanza (Día 2 - Mañana)

La habitación del hospital,  con su aroma a medicamentos y la luz tenue que se filtraba por las cortinas,  era un contraste con la vitalidad que emanaba de Orm.  Aunque inmóvil,  conectada a una maraña de cables y máquinas,  un leve movimiento en sus dedos,  casi imperceptible,  como una mariposa aleteando en la brisa,  trajo un susurro de esperanza a la habitación.  Koy,  Namtan y Sonya,  con sus rostros iluminados por la luz del amanecer,  se acercaron a la cama,  sus ojos llenos de expectación.

"Orm,  mi niña,  ¿puedes oírme?"  preguntó Koy,  su voz llena de ternura,  como una melodía suave que buscaba un eco en el corazón de su hija.

Orm intentó responder,  pero solo pudo emitir un débil sonido,  un susurro apenas audible,  como una hoja seca que se agita con el viento.

"Sí,  mamá",  susurró Orm,  su voz débil pero llena de determinación,  como un brote que lucha por abrirse paso a través de la tierra.

Escena 3:  Un Despertar Lento y Un Nuevo Desafío (Día 3 - Mañana y Tarde)

El tercer día,  Orm seguía mostrando pequeños avances.  Sus ojos se abrían con más frecuencia,  y respondía a algunos estímulos simples,  como apretar la mano de su madre o seguir con la mirada el movimiento de un objeto.  Thanawat,  aunque no podía estar presente todo el tiempo,  se mantenía al tanto de la situación a través de sus hombres de confianza,  quienes habían convertido el hospital en un fortín para proteger a su familia.  Namtan,  con su agudeza empresarial,  se encargaba de coordinar las tareas de la empresa en Estados Unidos,  mientras que los hombres de Thanawat se ocupaban de los negocios locales.

La tarde del tercer día,  la tranquilidad del hospital se vio interrumpida por una nueva amenaza.  La temperatura de Orm subió y los médicos detectaron una infección.  Thanawat,  al enterarse de la situación,  dejó de lado sus negocios por un momento para estar junto a su hija.  Las amigas de Orm,  Freen,  Becky,  Engfa y Charlotte,  llegaron al hospital para ofrecer su apoyo y compañía.  Lingling,  con su corazón lleno de amor por Orm,  se quedó a su lado,  contándole historias y canciones para animarla,  su voz suave como un bálsamo que buscaba calmar el dolor de su amada.

Escena 3: La Fuerza del Amor y Un Paso Adelante (Día 4 - Mañana y Tarde)

Con el apoyo de su familia y amigas,  Orm logró superar la infección.  Su cuerpo seguía débil,  pero su espíritu era fuerte.  Thanawat,  aunque preocupado,  se vio obligado a regresar a sus negocios.  Namtan,  con su capacidad para la organización,  se encargó de mantener a flote las empresas,  mientras que los hombres de Thanawat se ocupaban de la seguridad del hospital y la familia.

El cuarto día por la tarde,  Orm logró mover su brazo con más fuerza.  Sus ojos brillaban con una nueva esperanza.  Las amigas de Orm,  Freen,  Becky,  Engfa y Charlotte,  la visitaban a diario,  contándole historias divertidas y compartiendo momentos de alegría.  Lingling,  con su energía contagiosa,  la animaba a seguir luchando,  su amor por Orm  un faro de luz en la oscuridad.

Fin del Capítulo 30

Orm y Lingling: La mafia y la leyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora